Un tribunal federal de apelaciones de Estados Unidos dictó el martes un fallo que limita las acciones del presidente Donald Trump, al decidir que no puede invocar la Ley de Enemigos Extranjeros (AEA) de 1798 para acelerar las deportaciones de migrantes venezolanos. Este caso, que involucra acusaciones contra ciudadanos venezolanos por supuesta vinculación con el Tren de Aragua (TdA), se dirige hacia una posible resolución en la Corte Suprema.
La AEA fue utilizada por Trump a través de una proclamación en marzo, alegando que los venezolanos representaban una invasión y eran parte de una organización criminal extranjera. Sin embargo, un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito, con sede en Nueva Orleans, determinó por mayoría de 2 a 1 que la ley no se aplica en este contexto y desestimó el argumento de invasión presentado por la administración Trump.
Detalles del fallo
La AEA permite la expulsión de ciudadanos de naciones hostiles, pero solo bajo un estado de guerra declarado o si hay una invasión o incursión organizada. El tribunal subrayó que “que un país aliente la migración ilegal no equivale a enviar una fuerza armada y organizada”. Así, concluyó que no se ha demostrado que la migración masiva de venezolanos constituya una amenaza armada para Estados Unidos.
Este fallo se suma a la política de expulsión inmediata de inmigrantes indocumentados que Trump había reinstaurado en enero, permitiendo deportar a quienes no puedan demostrar al menos dos años de residencia continua en el país, sin necesidad de audiencia judicial. La decisión del tribunal de apelaciones es vinculante para los tribunales inferiores del Quinto Circuito, que incluye estados como Luisiana, Misisipi y Texas, donde se habían implementado deportaciones bajo la AEA.
Reacción de la ACLU
La demanda que cuestionó el uso de la AEA fue impulsada por la Unión de Libertades Civiles Estadounidense (ACLU), que celebró el fallo como un claro mensaje de que el presidente no puede declarar una emergencia militar a su antojo. Este tipo de decisiones judiciales son cruciales en un contexto donde las políticas migratorias y las declaraciones de emergencia se encuentran en el centro del debate político en Estados Unidos.
Con este fallo, se espera que la situación de los migrantes venezolanos en Estados Unidos tome un nuevo rumbo, aunque la última palabra la tendrá la Corte Suprema, que deberá pronunciarse sobre este tema en el futuro cercano.
