El presidente Donald Trump recibió una fuerte ovación de abucheos durante la final del US Open 2025, celebrada este domingo en el Arthur Ashe Stadium de Nueva York, donde se enfrentaron el español Carlos Alcaraz y el italiano Jannik Sinner. Este incómodo momento ocurrió tras el primer set, que Alcaraz ganó 6-2, cuando las cámaras del estadio enfocaron al mandatario, generando un mar de rechiflas junto a algunos aplausos aislados.
Reacciones a la presencia de Trump
El evento, que marcó el cierre de la temporada de Grand Slam, comenzó con un retraso de más de media hora debido a los estrictos protocolos de seguridad que acompañaron la presencia de Trump. No es la primera vez que el presidente enfrenta este tipo de reacciones adversas en eventos deportivos; desde que asumió el cargo en enero, ya había sido abucheado en la final de la Copa Mundial de Clubes en Nueva Jersey.
Sin embargo, en otras ocasiones, como en el Super Bowl, la Daytona 500 de NASCAR y varios combates de la UFC, Trump ha recibido una respuesta más cálida del público. Esta disparidad en las reacciones resalta la polarización que genera su figura en diversos eventos deportivos, donde los aficionados no dudan en expresar sus opiniones de manera contundente.
Próximas apariciones del presidente
Trump tiene programado asistir a la Ryder Cup de golf a finales de este mes, mientras que la Casa Blanca organiza una velada de artes marciales mixtas de la UFC. La realidad es que, a pesar de los abucheos, el presidente continúa sumando apariciones en eventos destacados, lo que demuestra su intención de permanecer en el ojo público, sin importar las reacciones que pueda provocar.
Este episodio en el US Open vuelve a poner de relieve la relación compleja entre el deporte y la política en Estados Unidos, un tema que sigue generando conversación y debate entre los aficionados y analistas por igual.
