El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el jueves que no volverá a referirse a nadie como “tigre de papel”. Esta afirmación fue realizada durante una conferencia de prensa conjunta con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan.
Trump enfatizó que “nunca llamaré a nadie tigre de papel”. Sin embargo, agregó que Rusia ha invertido enormes sumas de dinero en armamento, incluyendo bombas y misiles, además de las vidas humanas involucradas en el conflicto, y que, a su juicio, no han logrado conquistar territorio significativo. “Creo que es hora de parar”, manifestó Trump.
Esta declaración de Trump se produce en un contexto de creciente tensión internacional y críticas hacia la estrategia militar rusa. A medida que las dinámicas geopolíticas continúan evolucionando, sus palabras podrían tener un impacto tanto en la opinión pública como en las relaciones entre naciones.