Con la llegada del Día de Muertos, el horario de verano finaliza en la frontera norte de México. Esta noche, los habitantes deberán atrasar sus relojes una hora para adaptarse al horario de invierno que comenzará mañana.
A pesar de que en 2022 el Congreso de la Unión eliminó el cambio de horario en gran parte del país, esta medida se mantiene en la franja fronteriza debido a las dinámicas económicas y laborales. La intención es mantener la sincronización con las ciudades estadounidenses cercanas.
En el estado de Chihuahua, los municipios que colindan con Nuevo México y Texas —incluyendo Janos, Ascensión, Juárez, Coyame, Guadalupe D. B., Praxedis G. Guerrero, Ojinaga y Manuel Benavides— seguirán realizando este ajuste dos veces al año, en marzo y noviembre.
El nuevo horario entrará en vigor oficialmente a las dos de la mañana del domingo 2 de noviembre. Sin embargo, es recomendable que los ciudadanos ajusten sus relojes antes de irse a dormir para evitar confusiones al día siguiente.
Con este cambio, Juárez estará una hora detrás del centro del país, lo que es fundamental para evitar impactos comerciales y sociales con poblaciones estadounidenses como El Paso, Texas.
Según Lorenzo Soberanes, vicepresidente de Salud de la Cámara Nacional de Comercio en Juárez, el organismo humano requiere de tres a cuatro semanas para adaptarse al nuevo horario, lo que puede afectar a algunas personas en su rutina diaria.































































