En un acto que refleja la solidaridad y el compromiso social, la presidenta del DIF ha unido esfuerzos con empresarios para brindar apoyo a las personas afectadas por las recientes lluvias en Altamira. Esta colaboración busca mitigar los efectos devastadores que las inundaciones han causado en la comunidad.
Durante el evento, se destacó la importancia de la unión entre el sector privado y las organizaciones sociales para enfrentar situaciones de emergencia. La presidenta del DIF enfatizó que la ayuda no solo es necesaria en momentos de crisis, sino que también se debe fomentar un espíritu de cooperación constante en la sociedad.
Los empresarios presentes manifestaron su disposición para contribuir con donaciones y recursos que permitan atender las necesidades inmediatas de los damnificados. Se planea establecer centros de acopio y distribución de víveres, ropa y otros suministros esenciales para las familias más afectadas.
Esta iniciativa se presenta como un ejemplo de cómo la colaboración entre diferentes sectores puede generar un impacto positivo y efectivo en la vida de quienes enfrentan adversidades. A medida que se desarrollan los planes, se espera que más miembros de la comunidad se sumen a esta causa, promoviendo el bienestar y la recuperación de Altamira.
La situación actual pone de manifiesto la vulnerabilidad de ciertas zonas ante fenómenos climáticos, lo que subraya la necesidad de estar preparados para futuras eventualidades. La presidenta del DIF concluyó su intervención invitando a todos a participar en esta labor altruista, asegurando que cada pequeño esfuerzo cuenta en la reconstrucción de la comunidad.
































































