Durante la final del Circuito Excelencia Charra 2025, la Federación Mexicana de Charrería (FMC) rindió un emotivo homenaje a Joel Gómez Vázquez, un ícono de la charrería con más de 52 años de trayectoria en este deporte nacional. En un ambiente lleno de pasión y tradición, Gómez Vázquez fue reconocido por sus aportaciones y su destacado papel dentro de la comunidad charra.
Un legado familiar y deportivo
Previo a las competencias finales, el homenajeado, acompañado de sus hijos y nietos, quienes lucieron trajes de charros y escaramuzas, recibió el galardón en el Lienzo Charro frente a miles de aficionados. En el evento, se proyectó un video en las pantallas gigantes que contenía mensajes de su familia, quienes elogiaron su dedicación y pasión por la charrería, valores que ha sabido transmitir a las nuevas generaciones.
Gómez Vázquez, originario de San Pedro Huaquilpan, recordó momentos significativos de su carrera, como cuando lideró la Asociación de Charros de Pachuca y llevó al equipo a coronarse campeón nacional en dos ocasiones. Este charro, que ahora tiene 74 años, ha sido parte de la Galería de los Inmortales, junto a otros grandes como Miguel Lara y Aquilino Aguilar.
Un llamado a las nuevas generaciones
Con humildad, Gómez Vázquez expresó: “Me siento muy afortunado de haber sido galardonado con el ingreso al Salón de la Fama, ya que en Hidalgo existen cientos de asociaciones y una gran cantidad de charros de enorme calidad”. El impacto de su legado se amplifica al ver a su hijo, Joel Gómez, consolidarse como campeón estatal y un representante destacado de Hidalgo en el extranjero. En este contexto, llamó a los jóvenes a acercarse a la charrería o cualquier disciplina que fomente valores y formación personal.
Por otro lado, el exdirector de la FMC señaló que la charrería ha evolucionado hacia un nivel más profesional, mencionando que el promedio de puntos en las competencias ha aumentado de 200 a más de 400, un claro reflejo de la preparación y el esfuerzo que cada competidor invierte en este deporte.
El acto de reconocimiento fue acompañado por música de banda y mariachi, creando una atmósfera festiva que resonó con los vítores y aplausos de los asistentes, reafirmando la importancia de la charrería como un pilar de la cultura mexicana.