Tepeapulco, Hidalgo, fue escenario de una emotiva representación de la “Toma y Quema de la Alhóndiga de Granaditas” como parte de las celebraciones de las Fiestas Patrias 2025. Este evento conmemoró 92 años de la caracterización de uno de los momentos más significativos del inicio de la Guerra de Independencia de Nueva España.
El centro histórico de la cabecera municipal se llenó de cientos de residentes y turistas que asistieron a esta importante escenificación, que tuvo como protagonistas al cura Miguel Hidalgo y Costilla y su ejército de insurgentes.
El Grupo Independencia fue el encargado de llevar a cabo la representación, que duró aproximadamente 25 minutos, donde los asistentes revivieron la llegada de Hidalgo a la capital del estado de Guanajuato para tomar un bastión del imperio español.
Durante la rememoración, el orador oficial destacó que el 23 de septiembre, un contingente partió de Dolores Hidalgo hacia la capital de Guanajuato. En Atotonilco, el “Padre de la Patria” tomó como estandarte la imagen de la Virgen de Guadalupe para avanzar hacia la alhóndiga y enfrentarse a los “gachupines”, quienes se resistieron a rendirse. Se recordó también la heroica hazaña del “Pípila”, que cargó una piedra a sus espaldas para protegerse de las balas del ejército imperial y quemar la puerta de acceso a la fortificación.
Este evento, iniciado por Higinio Muñoz en 1933, ha sido presentado de manera ininterrumpida a lo largo de los años, manteniendo un compromiso con el pueblo y el Ayuntamiento. Cada año, se instala en la Plaza de la Constitución una representación artesanal de la Alhóndiga de Granaditas.
Hacia las 23:00 horas, después de un recorrido que comenzó en el surtidor y la “Caja de agua”, un grupo de indios, acompañados por un estandarte con la Virgen de Guadalupe y una banda de música, se unieron a las festividades. Con aguardiente, bailes y vítores, enfrentaron al enemigo que defendía la Alhóndiga, culminando la batalla con un estallido de luces y fuegos artificiales que deleitaron a los presentes.
Los actores, ataviados con trajes de alta sociedad de la época y otros que representaban a los insurgentes, dieron vida a los personajes que se unieron a Hidalgo en la lucha por la Independencia de México.
