La inseguridad en el transporte de carga se ha convertido en una preocupación latente para los actores del comercio en el norte de México. El Comce Noreste ha alzado la voz sobre la urgente necesidad de abordar este problema tanto en el marco del Plan México como en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Con un aumento de robos al autotransporte del 9% en 2024, alcanzando casi 16,000 incidentes, y un incremento del 34% en los robos al ferrocarril, la situación demanda atención inmediata.
Andrés Franco, director general del Comce Noreste, subrayó la gravedad del asunto al afirmar: “Sin duda, el tema de seguridad debe ser abordado en el Plan México y en la revisión del T-MEC. Debemos hacer equipo la iniciativa privada, el gobierno, organismos y academia para cabildear en Ciudad de México y en Washington. Lo que está pasando en el país afecta a toda la región de Norteamérica”. Esta colaboración busca establecer un frente común que permita mitigar los riesgos y proteger el comercio en la región.
Impacto económico y medidas de seguridad
El impacto económico de estos delitos es significativo. A nivel nacional, AMESIS reportó 15,937 robos al transporte de carga en 2024, concentrándose principalmente en las carreteras de Estado de México, Puebla, Guanajuato y Jalisco. En el sector ferroviario, la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF) registró 4,133 robos en el mismo año, un aumento alarmante comparado con el año anterior. La carga, productos industriales y bienes de consumo son los más afectados.
La Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra) reveló en su Encuesta Anual de Robo de Mercancías al Autotransporte que, mientras las pérdidas por robo en autotransporte disminuyeron un 17% de 5,800 millones de pesos en 2022 a 4,772 millones en 2023, las pérdidas en el ferrocarril aumentaron un 58%, reflejando un desbalance en la seguridad entre ambos modos de transporte.
Coordinación y desafíos futuros
En mayo de 2025, Jorge Santos Reyna, nuevo presidente de Caintra, informó que las pérdidas por robo en autotransporte de carga de empresas de Nuevo León se redujeron a 2,637 millones de pesos en 2024, una disminución del 29%. Asimismo, el robo en el ferrocarril cayó un 54%, con pérdidas reducidas a 521 millones de pesos en 2024. Santos Reyna destacó la importancia de la “coordinación entre autoridades de los tres niveles de gobierno y el sector empresarial” como un factor clave en estos logros.
No obstante, advirtió que aún queda mucho por hacer, ya que el impacto de los robos persiste y, en algunos casos, ha aumentado. La seguridad en el transporte de carga sigue siendo un reto importante que requiere atención continua y estrategias conjuntas para proteger tanto el comercio nacional como el internacional de México. La experiencia muestra que la colaboración efectiva entre sectores puede marcar la diferencia en la lucha contra el crimen y en la protección de la economía regional.
