Siigo Aspel ha dado un paso decisivo en la digitalización de las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) en México al establecer alianzas estratégicas clave. El CEO de Siigo Aspel para Latinoamérica y México, David Ortiz, enfatiza que la transformación digital ha pasado de ser una opción a convertirse en una necesidad urgente para los negocios en el país.
Un modelo de colaboración innovador
En un entorno donde más del 70% de las PyMEs enfrenta barreras para automatizar procesos administrativos y contables, la compañía ha implementado un modelo de colaboración que involucra a universidades, asociaciones empresariales, el gobierno y distribuidores de software. Este enfoque busca democratizar el acceso a herramientas tecnológicas y facilitar la operación de miles de negocios.
“El mercado nos dice que es costoso y difícil. Nosotros decimos que es accesible, fácil y que genera valor rápido”, aseguró Ortiz. La visión es clara: cambiar la percepción de los empresarios sobre la digitalización puede ser la clave para transformar la economía desde su base.
Desafíos culturales y formación de asesores
El verdadero reto que enfrentan las PyMEs no es solo tecnológico; implica un cambio cultural profundo. Según un estudio de Siigo Aspel y la Asociación de Emprendedores de México (ASEM), los principales obstáculos son el costo, la complejidad de implementación y la falta de tiempo. Para abordar esto, la compañía lanzó la Comunidad 3C, una red de capacitación para contadores que busca formar asesores capaces de guiar a las PyMEs en su transición digital.
En México, Siigo Aspel cuenta con más de 2,000 distribuidores activos que no solo implementan software administrativo, sino que también ofrecen capacitación y asesoría presencial a los empresarios. “Nuestro canal acompaña a los clientes, ayudándoles desde la facturación hasta la nómina o el control administrativo”, explicó Ortiz.
Un ecosistema colaborativo para el futuro
Las alianzas con universidades son otro componente esencial de su estrategia. Integrar sus soluciones en programas académicos de contaduría prepara a las nuevas generaciones para enfrentar los desafíos tecnológicos del futuro. Además, colaboran con asociaciones como ASEM y AMITI para fomentar políticas públicas que apoyen la transformación digital de las PyMEs.
El enfoque colaborativo de Siigo Aspel ha demostrado ser efectivo. La compañía reporta un crecimiento constante, superando el 20% anual en ventas y clientes en el país, gracias a su modelo de cooperación y cercanía con el canal de distribución.
“Cuando universidades forman a contadores en el uso de tecnología, cuando asociaciones difunden mejores prácticas, cuando el gobierno impulsa la digitalización y el canal de distribución acompaña a los empresarios, logramos un cambio real”, concluyó Ortiz.
Con la creciente demanda de soluciones digitales para PyMEs, el papel del canal de distribución se vuelve más relevante que nunca. La capacitación de contadores se convierte en un motor de confianza y adopción tecnológica en los negocios, lo que promete un futuro más brillante para la economía mexicana.
