Querétaro ha sido escenario de un trágico suceso que ha generado gran inquietud entre sus habitantes. La noche del 29 de julio, dos personas fueron asesinadas dentro de un vehículo en la conocida avenida Zaragoza, una de las arterias más transitadas del Centro Histórico. Este crimen ha desatado una serie de eventos que han mantenido a la población en alerta, especialmente por la presencia de hombres armados en camionetas blindadas en la misma área horas después del ataque.
La Secretaría de Seguridad Pública Municipal está investigando el hecho y ha desplegado un operativo para dar con el “presunto responsable”, quien, según informes preliminares, se encontraba en una camioneta con placas del estado de Guanajuato. A pesar de que algunos medios locales han especulado sobre posibles antecedentes penales de las víctimas, hasta el momento, esta información no ha sido confirmada oficialmente.
En un comunicado posterior, la Fiscalía General del Estado de Querétaro se refirió a “agresores” en plural, indicando que tanto fiscales como policías de investigación están trabajando para identificar a los implicados. Hasta ahora, las autoridades han llevado a cabo revisiones en comercios cercanos al lugar del crimen, aunque no han brindado más detalles sobre el progreso de las investigaciones.
En un desarrollo relacionado, horas después del ataque, las autoridades estatales detuvieron a ocho hombres armados en tres camionetas con vidrios polarizados sobre la misma avenida Zaragoza. Entre los detenidos se encontraba Diego Armando Estefanía Torres, presidente del Consejo Directivo de la Junta de Agua Potable de Cortazar, Guanajuato, y hermano de Marco Mauricio Estefanía Torres, actual alcalde de esa ciudad por el partido Movimiento Ciudadano. Durante la revisión, las autoridades encontraron armas de fuego de varios calibres, todas sin los permisos correspondientes.
De manera extraoficial, se ha informado que el grupo de hombres armados fue puesto bajo la custodia de la Fiscalía General de la República (FGR) para continuar con las indagatorias. Este caso no es aislado, ya que la familia Estefanía ha estado involucrada en situaciones de violencia en el pasado. En 2024, el alcalde Marco Mauricio Estefanía denunció amenazas de muerte, mientras que su padre, Hugo Estefanía, exalcalde del municipio, fue asesinado tras ser señalado por supuestos vínculos con el Cártel Santa Rosa de Lima.
Después de los disturbios, Diego Armando Estefanía grabó un video en Celaya, donde agradeció “la gran seguridad que tiene Querétaro”. En sus declaraciones, aseguró que la revisión realizada por las autoridades era parte de una rutina de vigilancia y que él no había sido detenido. En el video, expresó su agradecimiento a los elementos de la policía, señalando: “Nos pararon y revisaron, pero aquí anda su servidor afuera. Muy amables los POES de Querétaro”.
Este episodio ha dejado a la comunidad queretana preocupada por la seguridad en su entorno, especialmente en un estado que ha sido considerado relativamente seguro en comparación con otras regiones del país. La combinación de un asesinato a plena luz del día en una zona concurrida y la detención de personas armadas en un contexto familiar conflictivo ha encendido las alarmas sobre la violencia en la región.
Las autoridades continúan investigando ambos incidentes, y la comunidad espera resultados que ofrezcan respuestas y, sobre todo, garantías de seguridad en sus calles. La situación seguirá siendo monitoreada de cerca, ya que la tensión persiste en Querétaro, un estado que, hasta hace poco, era visto como un refugio de tranquilidad en medio de un panorama nacional complejo.