El Paquete Económico 2026, presentado el 9 de septiembre, marca un giro significativo en la política fiscal mexicana. Este nuevo enfoque no solo implica ajustes en los impuestos al consumo, sino que también introduce medidas que afectan directamente al sector de telecomunicaciones y a las plataformas digitales.
Un SAT con acceso en tiempo real
Una de las propuestas más destacadas es que el SAT tendrá acceso en tiempo real a los registros de las plataformas digitales. Esto significa que las autoridades fiscales podrán monitorear las transacciones y actividades de diversas aplicaciones y servicios en línea, lo que plantea serias interrogantes sobre la privacidad y la libertad de operación de estas empresas.
El análisis de una firma de juristas señala que esta medida refleja una voracidad recaudatoria sin precedentes, en un contexto donde el gobierno busca incrementar sus ingresos fiscales ante un panorama económico incierto.
Reforzando controles en telecomunicaciones
Por otro lado, el sector de telecomunicaciones se verá afectado por la continuación de las altas cuotas por el uso del espectro radioeléctrico, que son las más caras de América Latina. Este hecho podría estrangular aún más a las empresas en un sector que ya enfrenta retos significativos.
Además, se reinstaurará el controvertido mecanismo de bloqueo de plataformas digitales que no cumplan con sus obligaciones fiscales. Esta medida es vista como una tentación censora, pues podría limitar el acceso a servicios digitales esenciales para los usuarios mexicanos.
En resumen, el PEF 2026 propone un marco fiscal que no solo busca aumentar la recaudación, sino que también plantea un control más estricto sobre las plataformas digitales y el sector de telecomunicaciones, lo que podría generar un clima de incertidumbre tanto para empresas como para consumidores. La combinación de estas estrategias plantea un escenario complejo que merece un seguimiento cercano.
