Este domingo, habitantes de Zacatlán llevaron a cabo una manifestación en el Zócalo de su municipio para expresar su rechazo a la presentación del primer informe de la alcaldesa Beatriz Sánchez Galindo, quien había cancelado el evento público debido a la contingencia pluvial, pero lo realizó en un acto privado sin acceso para la ciudadanía.
Los manifestantes denunciaron que la decisión de llevar a cabo el informe de manera excluyente refleja una falta de compromiso con la transparencia y el cumplimiento de las obras públicas prometidas. Además, criticaron las declaraciones de la edil, quien se refirió a sus opositores como “anónimos”, “cobardes” y “sin fundamento”. Estas afirmaciones han sido interpretadas como una muestra de arrogancia y desdén por parte del gobierno local.
El movimiento, que se ha identificado en redes sociales bajo el lema “Zacatlán Se Une”, se presentó como un acto pacífico que busca desafiar la soberbia de la administración municipal. Los organizadores, que incluyen a vecinos, comerciantes, ex autoridades y jóvenes, han solicitado a los participantes que vistan de blanco y lleven carteles con los reclamos de sus respectivas comunidades.
En la convocatoria, que circuló a través de plataformas como Facebook y WhatsApp, se destaca la importancia de reunirse como ciudadanos libres, sin distinción de partidos políticos, para exigir un gobierno que sea receptivo y que “dé la cara” a la población. La convocatoria termina con un fuerte mensaje de unidad: “Nuestras críticas sí tienen fundamento, no somos anónimos y no somos cobardes”.
Los ciudadanos de Zacatlán consideran que esta protesta es fundamental para recuperar su voz pública ante un gobierno que, según ellos, ha cerrado el diálogo con la comunidad. La manifestación representa un llamado a la transparencia y a la atención a las demandas de los habitantes del municipio.