Un operativo llevado a cabo por la Fiscalía General de la República (FGR) resultó en la detención de un hombre en posesión de un arsenal oculto dentro del tanque de gasolina de su camioneta. La acción se realizó el pasado lunes en la Carretera Monterrey-Reynosa, específicamente en el municipio de General Bravo, Nuevo León.
El detenido, identificado como Inocencio “O”, fue interceptado por elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM), quienes realizaban una revisión de rutina en el kilómetro 174.5 de la mencionada carretera. Al inspeccionar la camioneta con placas del estado de Durango, los agentes encontraron un compartimento oculto que contenía ocho armas cortas, junto con sus respectivos cargadores.
Además de las armas, los uniformados aseguraron un total de 60 cartuchos útiles y 13 cargadores, lo que indica una preparación significativa para el uso de las armas encontradas. Este hallazgo resalta la preocupación por el tráfico de armas en la región, un tema que ha cobrado relevancia en los últimos años debido al aumento de la violencia en diversas partes de México.
Una vez realizada la detención, los elementos de la PFM pusieron a Inocencio “O” a disposición del agente del Ministerio Público Federal (MPF). Se ha iniciado la integración de una carpeta de investigación en su contra, por delitos que violan la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. Esta ley busca regular la posesión y uso de armas en el país, así como establecer sanciones para aquellos que incumplen con sus disposiciones.
Las autoridades han reiterado la importancia de desmantelar redes de tráfico de armas, que alimentan la violencia y la criminalidad en el país. El caso de Inocencio “O” es un ejemplo más de los esfuerzos que se están llevando a cabo para combatir este problema, y se espera que en los próximos días se determine la situación legal del detenido.
El hallazgo de este arsenal en un lugar tan inusual como el tanque de gasolina de un vehículo resalta la creatividad que pueden emplear los delincuentes para ocultar sus actividades delictivas. Las investigaciones continúan, y el caso podría abrir nuevas líneas de indagación sobre posibles redes de tráfico de armas en la región norte del país.