En un impactante momento durante la transmisión de Buenas Noches Familia en eltrece, el conductor Guido Kaczka no pudo contener las lágrimas al escuchar el desgarrador testimonio de un joven participante. El relato giró en torno a la pérdida de sus padres durante la pandemia de COVID-19 y las duras adversidades que enfrentó posteriormente, lo que generó una profunda conmoción en el estudio.
El joven compartió ante la audiencia que, tras la muerte de sus padres, sufrió la traición de un amigo de la infancia, lo que lo llevó a buscar nuevas formas de subsistencia. “Un amigo de la primaria me robó la parte de mi herencia. Yo comencé a cantar en los trenes para poder sobrevivir y aportar a la casa. Los había perdido a los dos juntos. El 8 y el 9 de mayo, los dos murieron por COVID, en pandemia”, narró, causando un silencio lleno de emoción entre los presentes.
La dolorosa experiencia de la pérdida
Al profundizar en las circunstancias de su pérdida, el joven explicó que sus padres fueron internados antes de que llegaran las vacunas y que no tuvo la oportunidad de despedirse de ellos. “Los internaron antes de las vacunas. Ahí los perdí. Mis papás estaban internados por separado. No podía verlos”, detalló, recordando la promesa hecha a su padre: “Yo le dije a mi viejo ‘conseguí un laburo y pase lo que pase los voy a poder mantener yo’. Pero bueno, nadie está listo para perder a los padres”.
Ante este conmovedor testimonio, Kaczka expresó: “Nos caímos los dos. Nos caímos todos. Son unas historias que son increíbles. Para hacer mi trabajo tengo que pasar un poco por encima las cuestiones porque contás la historia y me sentí ahí, en ese lugar, me sentí vos”. Además, destacó la importancia de la conexión entre el joven y su padre, resaltando la promesa cumplida: “¿Cantás en el tren? Me mató que le hayas dicho a tu papá que conseguiste trabajo y seguro te escuchó”.
Reflexiones sobre el dolor y la solidaridad
La emoción se extendió al resto del equipo, como reconoció el propio Kaczka: “El locutor está preocupado por mí porque nunca me vio así. Ni ninguno de ellos me vio así”. Al finalizar el segmento, el conductor compartió una reflexión personal sobre el impacto que los testimonios de vida tienen en él: “Mi mamá me decía la otra vez ‘no sé cómo aguantás las historias’. Uno aguanta hasta que no aguanta”, afirmó, visiblemente emocionado.
Por otro lado, la reciente tragedia del fallecimiento de Mila Yankelevich, una niña de siete años en un accidente náutico en Miami, ha conmocionado a la comunidad artística argentina. Mila era la menor de los nietos de Cris Morena y Gustavo Yankelevich, y su muerte ha reavivado el dolor de una familia que ya había enfrentado profundas tragedias. La noticia, confirmada el martes tras horas de incertidumbre, impactó tanto a figuras del espectáculo como al público en general.
Durante la emisión de su programa, Kaczka interrumpió la rutina habitual para dedicar unas palabras a la familia afectada. Visiblemente conmovido, expresó: “Cris, Gustavo, Tomás, Sofía, quiero mandarles un abrazo bien fuerte desde acá, desde El Trece. Y decirles que los queremos y los acompañamos con el corazón. Nos duele a todos los argentinos”.
El conductor intentó retomar el hilo del programa, pero la magnitud del dolor lo sobrepasó. Apenas logró pronunciar la frase habitual con la que presenta los juegos, mientras la audiencia percibía el esfuerzo por recomponerse ante la cámara. Este episodio se quedó grabado en la memoria de los televidentes, reflejando el impacto que la tragedia tuvo en el ambiente artístico y en la comunidad.