Durante el más reciente consejo de ministros, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, expresó sus preocupaciones sobre el uso del término “Ejército Gaitanista” para referirse al Clan del Golfo. Esta declaración surgió en el contexto del debate sobre la política de paz total promovida por el presidente Gustavo Petro.
Sánchez argumentó que el Estado no debería adoptar el nombre que estas organizaciones se autoasignan. “A veces también es bueno no llamarlos como ellos quieren llamarse, porque eso es de alguna manera crearles como un símbolo”, manifestó el ministro, enfatizando que figuras como Jorge Eliécer Gaitán representan valores y luchas muy diferentes a las del Clan del Golfo.
La intervención del ministro se produjo mientras presentaba estadísticas sobre los cultivos de uso ilícito en Colombia, señalando a los departamentos de Nariño, Putumayo y Norte de Santander como las áreas con mayor presencia de cultivos de hoja de coca. Esta información fue respaldada por gráficos que evidencian la situación actual de la producción de drogas en el país.
La observación de Sánchez llega en un momento en que diversos sectores han criticado la decisión del Gobierno de aceptar el nombre de “Ejército Gaitanista”, argumentando que esto podría implicar un reconocimiento de estatus que la organización busca proyectar. El ministro subrayó que utilizar la denominación que los grupos ilegales se asignan podría reforzar su imagen frente a las comunidades locales y en la esfera pública.
En su discurso, Sánchez también abordó los cambios en las políticas de erradicación de cultivos, indicando que la erradicación forzada ha disminuido en la actual Administración, mientras que la sustitución de cultivos ha tomado prioridad. La disminución de los índices de erradicación se relaciona con este cambio de enfoque, según sus declaraciones.
Las autoridades judiciales habían hecho advertencias sobre un posible “ilegal entramado de infiltración y obtención de información de seguridad nacional”, lo que generó preocupaciones sobre la seguridad del presidente Petro. Sin embargo, el ministro rechazó la idea de que existiera un riesgo directo para el mandatario.
Además de los temas de seguridad interna, Sánchez amplió su análisis a los desafíos que enfrenta el país en términos de control territorial y la presencia de economías ilegales. Según el ministro, los cultivos ilícitos siguen siendo un factor clave en la financiación de grupos armados fuera de la ley.
A medida que se desarrolla el proceso de paz total, el debate sobre el reconocimiento del Clan del Golfo como “Ejército Gaitanista” se torna cada vez más relevante. Esta decisión ha sido interpretada como parte de la estrategia del Gobierno para fomentar diálogos y negociaciones. Sin embargo, la advertencia de Sánchez añade un matiz importante sobre las implicaciones simbólicas que conlleva dicho reconocimiento.
Al finalizar su presentación, el ministro reiteró que el papel de la Fuerza Pública es crucial para garantizar el control territorial y que, sin importar la estrategia adoptada, el Estado debe mantener una presencia activa en las regiones donde operan grupos ilegales. La sesión del consejo de ministros dejó claro que, más allá de los aspectos técnicos, hay un debate en curso sobre los símbolos y denominaciones vinculados a los procesos de negociación.
