El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha expresado su rechazo a la designación del senador morenista Carlos Lomelí Bolaños como presidente de la Comisión de Marina en el Senado. En una conferencia de prensa realizada el 23 de septiembre, el presidente nacional del PRI, Alejandro Alito Moreno Cárcenas, acusó al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) de intentar encubrir supuestos vínculos con el crimen organizado al otorgar esta comisión a un legislador que ha sido objeto de investigaciones por parte de la DEA y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
La controversia surge tras la aprobación de un acuerdo por parte del pleno del Senado, que sustituyó a Moreno Cárcenas en la presidencia de la Comisión de Marina, colocándolo en lugar de Lomelí Bolaños. Esta decisión fue criticada fuertemente por la bancada priista, que considera que se trata de un acto de revanchismo político.
El coordinador del PRI en la Cámara Alta, Manuel Añorve Baños, calificó el cambio como un “acto de revanchismo político”. Por su parte, el senador Rolando Zapata Bello denunció un “albazo” en la Comisión y advirtió que el acuerdo carece de proporcionalidad en la distribución de las presidencias de las comisiones parlamentarias.
Moreno anunció que el PRI ha presentado denuncias formales ante la DEA, el FBI, el Departamento de Justicia y el Departamento del Tesoro, acompañadas de documentos y acuses de recibo. Esto se produce en un contexto donde Moreno también ha señalado que la información sobre los presuntos vínculos de Lomelí y otros legisladores de Morena, como Adán Augusto López, con grupos criminales es de dominio público y está respaldada por investigaciones periodísticas y judiciales.
En medio de estas tensiones, Moreno Cárcenas se refirió directamente a López Hernández, a quien llamó “narcosenador”, y presentó un gráfico que denominó “Cartel de Macuspana”, que supuestamente estaría encabezado por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y compuesto por familiares y operadores políticos de Morena. Según el dirigente del PRI, este grupo habría pactado con cárteles y desviado recursos públicos.
Finalmente, Alejandro Moreno hizo un llamado a la sociedad civil y a las fuerzas políticas de oposición para unirse en un frente amplio que defienda la Constitución, la democracia y las libertades. Reiteró que el PRI continuará luchando por la justicia, la seguridad y la paz, y se proclamó listo para ser una opción real de oposición frente a Morena en el Congreso.