Un robo de taxi por aplicación en la alcaldía Iztacalco culminó en la detención de tres jóvenes, tras una intensa persecución que se extendió hacia Gustavo A. Madero. La intervención de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México fue clave en el desenlace de este incidente, que dejó al conductor del vehículo afectado con una experiencia aterradora.
Los hechos se desarrollaron cuando los agentes de la SSC realizaban patrullajes preventivos y fueron alertados por los operadores del Centro de Comando y Control (C2) Norte sobre un robo en curso. La denuncia provenía de un hombre de 45 años, quien relató a las autoridades que tres personas solicitaron un viaje a través de la aplicación de taxi donde trabaja. Al abordar el vehículo, lo amagaron con una pistola, lo despojaron del automóvil y se dieron a la fuga.
El conductor, que logró mantener la calma durante el asalto, activó el sistema de GPS de su vehículo, lo que permitió a los agentes seguirle la pista. La ubicación fue clave, ya que facilitó la persecución que se inició en la colonia Juventino Rosas y culminó en la intersección de la avenida Central y la Calle 12, en la colonia Villas de Aragón, en Gustavo A. Madero.
Una vez que los policías localizaron el taxi, interceptaron a los tres sospechosos y les solicitaron que descendieran del vehículo. Durante la revisión preventiva, uno de los detenidos, un hombre de 26 años, fue encontrado en posesión de una réplica de arma de fuego, lo que confirmó las sospechas de los agentes sobre la naturaleza del robo.
El afectado, quien había estado en contacto constante con las autoridades, pudo identificar a sus atacantes en el lugar. Al expresar su deseo de proceder legalmente contra ellos, se activaron los protocolos correspondientes y los tres jóvenes, un hombre de 26 años y dos mujeres de 28 y 29 años, fueron detenidos. Las autoridades les informaron de sus derechos constitucionales antes de ponerlos a disposición del agente del Ministerio Público, quien se encargará de determinar su situación jurídica.
Este incidente pone de relieve la creciente preocupación por la seguridad en la Ciudad de México, especialmente en el contexto de los servicios de transporte por aplicación, que han sido objeto de críticas por la vulnerabilidad de sus operadores ante actos delictivos. La rápida respuesta de la SSC y la colaboración del conductor del taxi son un ejemplo de cómo la tecnología puede ser utilizada en la lucha contra la delincuencia.
En un entorno donde los robos de vehículos son cada vez más comunes, es fundamental que tanto las autoridades como los ciudadanos trabajen juntos para prevenir este tipo de delitos y garantizar la seguridad de todos. La actuación del SSC en este caso es un recordatorio de que la vigilancia y la respuesta oportuna pueden marcar la diferencia en la vida de las personas afectadas.