La tarde del 14 de septiembre, un asalto a mano armada sacudió la tranquilidad del poblado de Chapultepec, en Cuernavaca. Dos individuos, que aparentaban ser agentes de seguridad privada, irrumpieron en una joyería ubicada en la Plaza Chapultepec, situada a pocos metros de la emblemática glorieta de La Luna.
Según los informes preliminares, el atraco ocurrió alrededor de las 18:58 horas. Los delincuentes, armados y con un actuar amenazante, obligaron al encargado del establecimiento a entregar varias alhajas de alto valor. Aunque el monto total de lo robado no ha sido confirmado, la situación generó un clima de pánico entre los presentes.
Una vez que lograron su cometido, los asaltantes se dieron a la fuga por la calle De la Luz. En su escape, interceptaron a un agente de la Policía Vial, quien se encontraba en la zona y le sustrajeron su arma de cargo. Este acto no solo evidenció la audacia de los delincuentes, sino también la vulnerabilidad de las fuerzas de seguridad en momentos críticos.
Las autoridades locales, alarmadas por la gravedad del incidente, implementaron de inmediato un operativo conjunto en la zona con el objetivo de localizar a los responsables. A pesar de los esfuerzos, hasta el cierre de esta edición, no se había logrado dar con el paradero de los delincuentes, lo que ha generado preocupación entre los habitantes de la región.
Este asalto no solo pone de relieve los riesgos a los que se enfrentan los comerciantes en áreas que, hasta ahora, se consideraban seguras, sino que también plantea interrogantes sobre la efectividad de las medidas de seguridad implementadas en Cuernavaca. Los ciudadanos esperan respuestas y una pronta acción por parte de las autoridades para restablecer la tranquilidad en su comunidad.