El grupo parlamentario de Vox ha presentado una solicitud formal a la Mesa del Parlament para que se inicie un procedimiento sancionador contra la diputada Pilar Castillejo, presidenta de la CUP. Esta petición se produce tras su detención por el ejército israelí mientras formaba parte de la Global Sumud Flotilla.
En el documento, Vox argumenta que Castillejo ha descuidado sus responsabilidades como legisladora. Según la formación, ha faltado a varias sesiones y ha dejado de asistir a plenos y comisiones del Parlamento, lo que justifica su solicitud de sanciones.
Por lo tanto, exigen que se suspenda su salario hasta que regrese a España y retome su actividad parlamentaria. La situación ha generado un intenso debate en el ámbito político, evidenciando las tensiones que existen en torno a la cuestión de las acciones de los representantes públicos en el contexto de conflictos internacionales.
Este episodio reaviva las discusiones sobre el deber de los diputados de cumplir con sus funciones mientras participan en actividades que pueden ser consideradas controvertidas o que puedan interferir con sus responsabilidades legislativas.
Vox, conocido por sus posturas firmes en temas de política nacional e internacional, ha mantenido que la acción de Castillejo es inaceptable y que debe rendir cuentas por su comportamiento.
A medida que el caso avanza, se espera que la Mesa del Parlament tome una decisión sobre la solicitud de Vox, lo que podría sentar un precedente importante en la regulación de las actividades de los diputados en relación con su labor parlamentaria.
