Un estudio reciente revela que las personas que luchan contra la adicción tienen mayores probabilidades de éxito en su recuperación si también logran dejar de fumar. Los investigadores encontraron que aquellos que abandonan el cigarrillo presentan hasta un 42% más de posibilidades de recuperarse de su adicción a sustancias ilícitas. Este hallazgo se publicó en la revista JAMA Psychiatry.
La doctora Nora Volkow, directora del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA), destacó que estos resultados subrayan la importancia de integrar programas para dejar de fumar en todos los tratamientos para el abuso de sustancias. “Ahora tenemos evidencias sólidas que indican que dejar de fumar cigarrillos predice una mejor recuperación de otros trastornos por uso de sustancias”, señaló.
Resultados del estudio
El análisis se realizó con datos de casi 2,700 adultos con antecedentes de trastorno por uso de sustancias, a quienes se dio seguimiento entre 2013 y 2018. A estos individuos se les preguntaba anualmente sobre su consumo de tabaco y sustancias ilícitas. Los resultados mostraron que dejar de fumar se asocia directamente con un 30% más de probabilidades de recuperación, incluso al considerar otros factores relevantes.
El investigador principal, doctor Wilson Compton, también subrayó que, a pesar de los conocidos beneficios para la salud que conlleva dejar de fumar, este aspecto no ha sido priorizado en los programas de tratamiento de adicciones. “Este hallazgo refuerza la necesidad de incluir el abandono del tabaquismo como parte del tratamiento de la adicción”, afirmó Compton.
Limitaciones del estudio
A pesar de la relevancia de los hallazgos, los investigadores advirtieron que, al tratarse de un estudio observacional, no se pudo establecer una relación causal directa entre dejar de fumar y la recuperación de la adicción. Por lo tanto, se requiere de más investigación para determinar una conexión causal y encontrar las mejores formas de apoyar a quienes están en tratamiento o en proceso de recuperación.
La doctora Volkow concluyó que el estudio “subraya la importancia de abordar las diferentes adicciones juntos, en lugar de hacerlo de forma aislada”, lo que podría marcar la diferencia en la efectividad de los tratamientos para las adicciones. Este enfoque integral podría ser clave para mejorar las tasas de recuperación en un campo donde la lucha contra la adicción sigue siendo un desafío significativo.