Un reciente análisis realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha revelado que la mayoría de las cremas antiarrugas disponibles en supermercados, farmacias y perfumerías presentan una eficacia muy limitada. En su estudio, se evaluaron 13 productos y se concluyó que, en promedio, estos cosméticos logran disminuir menos del 20% la profundidad de las arrugas.
La OCU destacó que, aunque muchas de estas cremas prometen resultados significativos, los beneficios observados están más relacionados con factores como la hidratación temporal de la piel en lugar de un efecto real y duradero en la reducción de arrugas.
Este informe pone de manifiesto la necesidad de que los consumidores sean críticos y escépticos ante las afirmaciones publicitarias sobre la efectividad de estos productos. El análisis de la OCU sugiere que, en lugar de gastar en cremas que prometen una transformación drástica, podría ser más beneficioso adoptar una rutina de cuidado de la piel basada en factores comprobados.
Así, la OCU invita a los consumidores a informarse mejor y a tomar decisiones fundamentadas sobre los productos que eligen para el cuidado de su piel.
