Durante la tercera reunión del Grupo de Trabajo Intergubernamental (GTI), realizada del 3 al 7 de noviembre en Ginebra, los Estados Miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) iniciaron un debate significativo sobre el borrador del anexo del Acuerdo de Pandemias. Este anexo establece un sistema de acceso a patógenos y participación en los beneficios, conocido como PABS.
El sistema PABS se considera un elemento crucial del acuerdo global adoptado a principios de 2025, cuyo objetivo es reforzar la seguridad mundial ante futuras pandemias. El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó su agradecimiento a los Estados Miembros por sus esfuerzos en la negociación del primer borrador, destacando la importancia de encontrar soluciones comunes ante los desafíos que presentan las pandemias.
Ghebreyesus afirmó: “La solidaridad es nuestra mejor defensa. La finalización del Acuerdo sobre Pandemias representa nuestra promesa colectiva de proteger a la humanidad”. Este acuerdo busca que los países puedan identificar rápidamente los patógenos con potencial pandémico y compartir la información y material genético necesario para el desarrollo de pruebas, tratamientos y vacunas.
El sistema PABS permitirá un intercambio rápido y eficiente de materiales e información sobre secuencias de patógenos. Además, asegurará que los beneficios derivados de estos materiales se distribuyan de manera justa y equitativa. El borrador en discusión incluye disposiciones destinadas a operacionalizar los compromisos del Artículo 12 del Acuerdo, que se centra en el acceso equitativo a herramientas que salvan vidas durante crisis sanitarias.
El embajador de Brasil, copresidente del GTI, Tovar da Silva Nunes, subrayó la necesidad de abordar difíciles decisiones para conseguir un mundo más seguro frente a futuras pandemias. “Las negociaciones han demostrado la capacidad de los Estados Miembros para enfrentar cuestiones complejas, garantizando respuestas justas y basadas en la solidaridad”, aseguró.
Nunes confía en que se presentará un anexo finalizado a la Asamblea Mundial de la Salud para su adopción en mayo de 2026, lo que sería un paso crucial en la lucha contra las pandemias futuras.






























































