La doctora Irene Diéz, ginecóloga y presidenta de la Sección de Suelo Pélvico de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), ha subrayado la importancia de buscar atención médica para la incontinencia urinaria, un problema que afecta a cerca de tres millones de personas en España. Según Àngels Roca, presidenta de la Asociación para la Incontinencia Anal y Urinaria (ASIA), aunque la campaña publicitaria protagonizada por la actriz Concha Velasco en 2006 ayudó a desmitificar este trastorno, muchas mujeres han dejado de consultar a sus médicos de Atención Primaria.
A pesar de que la incontinencia urinaria está frecuentemente asociada al envejecimiento, también impacta a una parte significativa de la población más joven. En mujeres menores de 50 años, los factores como el embarazo, el parto vaginal y la práctica de deportes de alto impacto, como correr y CrossFit, son comunes. En la población mayor, a partir de los 50 años, los cambios hormonales y musculares en el suelo pélvico modifican el perfil de la incontinencia, que suele ser más mixto.
Ante esta problemática, se ha constituido la Alianza contra la Incontinencia Urinaria (ALiNUR), formada por diversas sociedades científicas y asociaciones de pacientes. Su objetivo es visibilizar y mejorar la atención a esta condición, que representa un creciente problema de salud pública en el país.
La doctora María Victoria García, miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Enfermería Geriátrica y Gerontológica (SEEGG), enfatizó la necesidad de capacitar a los médicos de familia y de impulsar el papel de enfermeras de enlace para mejorar la atención y el seguimiento de los pacientes.
La incontinencia urinaria se ha convertido en un tema que requiere un enfoque integral. A pesar de que muchos tratamientos son paliativos, ALiNUR demanda que las mujeres tengan acceso a todas las alternativas terapéuticas disponibles, incluidas nuevas soluciones innovadoras. Sin embargo, la falta de datos precisos sobre la prevalencia de esta condición en España dificulta la comprensión del impacto total que tiene en la salud de las mujeres.
La doctora Irene Diéz advierte que el uso de compresas sin la orientación médica adecuada no es la solución. “Los pacientes deben informarse y entender más sobre su patología”, afirmó. En 2022, los productos absorbentes representaron el 59% de los productos sanitarios prescritos, generando un impacto ambiental significativo, con más de 172,000 toneladas de residuos anuales.
El estigma asociado a la incontinencia urinaria es un factor que contribuye al aislamiento social de muchas mujeres, quienes a menudo evitan discutirlo con profesionales o incluso con su entorno. Esto limita su acceso a tratamientos que podrían mejorar su calidad de vida. La falta de formación adecuada de los profesionales de la salud también se ha identificado como un desafío importante que debe ser abordado.
Finalmente, la doctora Diez resaltó que el uso constante de pañales puede incrementar el riesgo de infecciones urinarias y que muchas mujeres optan por deshidratarse para reducir la producción de orina. Con una coordinación adecuada entre diferentes niveles de atención, se podría mejorar significativamente la situación de aquellas que padecen incontinencia urinaria.

































































