Con motivo del Día Internacional de la Podología, el Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos (CGCOP) ha subrayado la importancia fundamental de esta profesión, que reúne a cerca de 10.000 expertos en España, en la salud pública y la calidad de vida de los ciudadanos.
Históricamente, la atención a los pies fue considerada una cuestión secundaria o puramente estética. No obstante, en la actualidad, la podología ha emergido como un pilar esencial en el ámbito sanitario, desempeñando funciones preventivas, diagnósticas y terapéuticas que impactan directamente en el bienestar general de las personas.
“El podólogo no solo se ocupa de los pies: se dedica a las personas. Escucha, acompaña y busca soluciones que restauran la calidad de vida y el bienestar”, afirmó Elena Carrascosa, presidenta del CGCOP. “La asignatura pendiente es lograr una participación mucho más significativa en la sanidad pública, ya que la presencia de estos profesionales es casi testimonial en muchas comunidades autónomas y inexistente en otras”, agregó Carrascosa.
La evolución de la podología en España ha sido notable. Se ha pasado de una formación sin titulación universitaria específica a contar con un completo sistema educativo que incluye grado, máster, doctorado y cátedras, lo que permite a los podólogos tratar patologías complejas, prescribir diversos tratamientos, incluyendo los farmacológicos, y realizar intervenciones quirúrgicas.
El esfuerzo de generaciones de profesionales ha conseguido que la podología goce de un reconocimiento académico, científico y sanitario totalmente consolidado, y hoy se considera parte integral de un sistema de salud más eficiente y sostenible, enfocado en la prevención.
En el ámbito preventivo, la labor de los podólogos es crucial para pacientes diabéticos, donde la detección temprana de lesiones puede prevenir la aparición de úlceras, infecciones o incluso amputaciones. Asimismo, en el cuidado de personas mayores, la intervención podológica es fundamental para evitar caídas y mantener su autonomía.
Recientemente, la profesión ha incorporado nuevas tecnologías y herramientas digitales que han transformado el diagnóstico y tratamiento de patologías del pie, a menudo con el apoyo de la inteligencia artificial. Se utilizan desde análisis digitales de la pisada hasta plantillas 3D, así como láser, ecografía y cirugías mínimamente invasivas.
“La podología avanza al ritmo de la ciencia, pero sin perder su esencia: la atención cercana y personalizada. Nuestro desafío consiste en integrar la innovación tecnológica sin sacrificar el enfoque humano”, enfatizó Carrascosa.
Ante el envejecimiento de la población, el CGCOP reitera su compromiso con la sociedad, la investigación y la formación continua de los profesionales. “Cuidar de los pies es cuidar la salud global. Son el soporte de nuestra vida diaria y la base de nuestra autonomía y bienestar”, concluyó la presidenta.
El CGCOP invita a la ciudadanía a reflexionar sobre la relevancia de la salud del pie y el papel crucial que juegan los podólogos en la prevención, tratamiento y mejora de la calidad de vida de las personas en este Día Internacional de la Podología.
