Este martes, el Consejo de Ministros aprobará una de las leyes sanitarias más anticipadas en España: el endurecimiento de la ley antitabaco. La nueva norma busca equiparar la legislación sobre el tabaco a todos los productos derivados y ampliar las zonas libres de humo. Sin embargo, sorprendentemente, se ha decidido excluir el empaquetado neutro de las cajetillas, una de las principales demandas del sector antitabaco. Esta omisión se debe a la falta de acuerdo entre Sanidad, liderada por Sumar, y la parte socialista del Gobierno, según fuentes del departamento que encabeza Mónica García.
Medidas y Reacciones
Sanidad no renuncia a la posibilidad de que el empaquetado neutro se introduzca durante el proceso parlamentario, que aún tiene un largo camino por recorrer. La ley, que se aprobará en primera vuelta este martes, deberá recabar informes necesarios y volver al Consejo de Ministros antes de iniciar su paso por las Cortes. Aunque cuenta con el respaldo de las principales sociedades médicas y asociaciones de pacientes, también enfrenta el rechazo de la industria tabacalera y los hosteleros, preocupados por el impacto económico que podría tener la prohibición de fumar en terrazas.
La intención de ampliar los espacios sin humo es clara: proteger a la población, especialmente a trabajadores, menores y embarazadas, y desnormalizar el consumo de tabaco en lugares compartidos. Además, se vetará el uso de tabaco en campus universitarios, centros educativos, instalaciones deportivas, marquesinas de transporte, vehículos laborales, zonas exteriores de ocio, playas y espacios naturales. Se espera que el listado completo de estas restricciones se conozca este martes.
Regulación de Nuevos Productos
La norma también contempla regular el uso de cigarrillos electrónicos, dispositivos de tabaco calentado y bolsitas de nicotina, que tendrán las mismas restricciones en espacios públicos. Esta medida busca desincentivar el consumo, especialmente entre jóvenes. Los médicos han alertado que el vapeo puede ser la “puerta de entrada” al tabaco convencional, y desde hace tiempo exigen su restricción, denunciando además las “maniobras” de la industria para presentar estos nuevos productos como más saludables.
El Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) se ha manifestado “extremadamente alarmado” por la decisión de dejar fuera el empaquetado neutro, considerándolo una “cesión” a la presión de las tabacaleras.
El empaquetado neutro se ha implementado ya en 40 países y ha demostrado ser una de las medidas más efectivas para reducir el consumo, especialmente entre adolescentes. De acuerdo con el CNPT, este enfoque contribuye a evitar el inicio del tabaquismo, un problema de salud pública que causa anualmente alrededor de 60,000 muertes prematuras en España.
A pesar de que el endurecimiento de la ley se enmarca dentro de una estrategia más amplia del Gobierno para luchar contra el tabaquismo, que incluye la financiación de tratamientos y campañas para dejar de fumar, varias medidas clave, como el empaquetado neutro y el aumento de precios del tabaco, quedarán fuera de la norma. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que un aumento del 10% en el precio del tabaco puede reducir el consumo en un 4%.
Por otro lado, se anunció que antes de finalizar el año, Sanidad aspira a concluir el proceso para limitar el uso de aromatizantes en los cigarrillos electrónicos y restringir la cantidad de nicotina en las bolsitas. Esto se alinea con el objetivo de reducir el número de fumadores, ya que desde la promulgación de la primera norma en 2005 y su reforma en 2010, el consumo ha disminuido, pero actualmente la tendencia se ha estancado.
La prevalencia del tabaquismo es del 25.9% en hombres y del 18.5% en mujeres, y el número de personas que dejan de fumar se ha mantenido estable desde 2014. Según un estudio presentado por la Sociedad Española de Epidemiología, actualmente en España fuman alrededor de ocho millones de personas, en su mayoría provenientes de los niveles socioeconómicos más bajos. En este contexto, resulta crucial seguir evaluando y ajustando las políticas públicas para combatir el tabaquismo en el país.