Septiembre se perfila como un mes determinante para la economía mexicana, con retos cruciales en el comercio exterior y la inversión extranjera. La asesoría de la Presidencia ha elaborado un análisis que servirá para guiar al presidente y su gabinete en la formulación de políticas públicas, algo esencial ante la situación actual.
La situación del comercio exterior
Este análisis destaca la vulnerabilidad de la economía mexicana, especialmente en el sector de comercio exterior. Esta mañana, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, enfatizó que México continúa siendo el principal proveedor de Estados Unidos, al haber exportado 264,382.7 millones de dólares en el primer semestre de 2024, lo que representa el 15% de las importaciones totales de la Unión Americana. Comparativamente, Canadá y China se quedan atrás con 198,224.1 millones y 167,478.8 millones de dólares, respectivamente, según datos de la Oficina del Censo estadounidense.
Además, el Banco de México reportó que el país captó 34,264.5 millones de dólares en inversión extranjera directa (IED) en el mismo periodo. Es importante señalar que Estados Unidos representa el 61.6% de nuestro comercio total, mientras que el T-MEC ampara el 64.2% de todas nuestras transacciones comerciales.
Desafíos y oportunidades en el horizonte
El distanciamiento del gobierno mexicano con el Congreso estadounidense complica aún más la relación con Donald Trump, quien enfrenta presiones por temas pendientes desde el sexenio anterior, como la controversia de Calica en Quintana Roo y la implementación de reformas judiciales y energéticas. A su vez, el comercio con los 27 miembros de la Unión Europea representa el 7.2% de nuestro comercio total, mientras que China, sin un acuerdo comercial con México, representa el 10.7%.
La renegociación del T-MEC tendrá un impacto directo en estas relaciones, ya que tanto Estados Unidos como Canadá buscan reducir las importaciones chinas en la región. El desarrollo de nuevos mercados será un proceso lento, dado que nuestros principales productos de exportación son bienes intermedios, lo que exige encontrar nuevos socios comerciales y obtener certificaciones como proveedores confiables.
La visita programada para octubre de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, podría abrir nuevas oportunidades, aunque el área de Asia-Pacífico se presenta como la más prometedora por sus altas tasas de crecimiento económico en las próximas dos décadas.
En cuanto a la IED, los 34,264.5 millones de dólares reportados en el primer semestre representan un crecimiento del 2.2% respecto al mismo periodo de 2024, donde 3,148.6 millones (el 9.2% del total) son nuevos proyectos. Sin embargo, esta cifra sigue muy por debajo de la tendencia histórica del 40% de nuevos ingresos trimestrales, lo que indica que México debe mejorar su atractivo para la inversión.
Septiembre será clave, con la llegada de Marco Rubio mañana, tres meses después de la visita del subsecretario Christopher Landau, para abordar temas de narcóticos y migración, así como la posibilidad de una reunión con Trump. Rubio ha sido un promotor de la terminación del acuerdo sobre tomates. El 18 de septiembre llegará Mark Carney para discutir el T-MEC, anticipando un anuncio trilateral sobre la renegociación del tratado.
En este contexto, México no puede permitirse seguir en el aislamiento que ha propiciado Andrés Manuel López Obrador; debe reposicionarse como un actor clave en el panorama internacional, utilizando una retórica actual para fortalecer su influencia y asegurar su lugar en el comercio global.
