El Ministerio de Agricultura de Taiwán confirmó el reciente sacrificio de decenas de cerdos luego de que se detectaran los primeros casos de peste porcina africana en la isla. Según el comunicado emitido el jueves, hasta el momento no se han reportado más contagios.
La peste porcina africana es una enfermedad altamente contagiosa y mortal para los cerdos, lo que podría resultar devastador para la industria porcina del país, que genera una cifra equivalente a unos 2.300 millones de dólares al año, según datos oficiales.
El viceministro de Agricultura, Tu Wen-jane, aseguró en una conferencia de prensa en Taichung, donde ocurrieron los contagios, que “hasta ahora no se han observado anomalías en otros lugares”. Las muestras de cerdos muertos en una granja del distrito de Wuqi dieron positivo a la enfermedad, lo que llevó al sacrificio de 195 animales este mes.
Para evitar la propagación de la infección, se estableció una “zona de control” de tres kilómetros alrededor de la granja afectada. Además, el transporte y sacrificio de cerdos en toda la isla se prohibió durante cinco días.
El presidente Lai Ching-te instó a la población a “no entrar en pánico” y pidió a los gobiernos locales, asociaciones ganaderas y criadores de cerdos que se mantengan “muy atentos” ante esta situación.






























































