La Unión Europea ha decidido movilizar un total de 1,8 millones de euros en fondos de emergencia, así como recursos técnicos y aéreos, en respuesta al reciente brote de ébola declarado en el centro de la República Democrática del Congo (RDC). Este apoyo llega en un momento crítico, ya que las autoridades congoleñas informaron sobre el brote en septiembre, que ha dejado un saldo de 42 muertes hasta la fecha.
Según comunicados emitidos desde Bruselas, las principales prioridades en este esfuerzo son asegurar el acceso a las áreas más remotas y proporcionar asistencia médica experta, especialmente en el uso de equipos específicos para el tratamiento del ébola. Para ello, se ha confirmado el despliegue de un helicóptero medicalizado de la flota humanitaria europea, además de establecer una oficina temporal con un equipo de 36 expertos sanitarios en la provincia de Bulape, que es la más impactada por este brote.
Asimismo, la Unión Europea ha asignado los 1,8 millones de euros para fortalecer la respuesta sobre el terreno mediante la colaboración con sus socios humanitarios. La oficina de la UE en Kinshasa está actuando como un enlace crucial con los actores humanitarios en la región para asegurar una respuesta rápida en caso de que la situación se agrave.
Desde 1976, el país ha enfrentado 15 brotes de ébola, siendo el más devastador el ocurrido entre 2018 y 2020, que resultó en 3,481 casos, 2,299 muertes y 1,162 supervivientes. La situación actual resalta la necesidad de una respuesta coordinada y eficaz para contener el virus y proteger a las comunidades más vulnerables.