En un intenso debate en el Senado, el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, lanzó duras críticas al Partido Popular (PP) por lo que considera un “fariseísmo” en su defensa de la independencia judicial. Según Bolaños, el PP pide protección para los jueces, pero al mismo tiempo, ataca y menosprecia a aquellos que investigan a sus miembros.
Recriminaciones en el Senado
Durante su intervención, Bolaños respondió a la portavoz del PP en la Cámara Alta, Alicia García, quien cuestionó al Gobierno sobre la defensa de los magistrados ante lo que considera una “permanente agresión” a su independencia. “Cuando un fiscal o un juez investiga a alguien del PP, lo atacan, le denigran y le desprestigian, lo han hecho siempre”, afirmó el ministro, recordando que este comportamiento no es nuevo en el partido.
Bolaños también citó declaraciones del expresidente José María Aznar, quien había señalado que la judicatura “no debe ser una pasarela para el estrellato”. “Ustedes aplaudieron esas palabras”, comentó el ministro, sugiriendo que la postura del PP varía según quién formule las críticas. Esta actitud, según Bolaños, refleja el “fariseísmo” del PP, “actual, más que nunca”.
Un contexto de acoso judicial
El ministro no se detuvo ahí y puso de relieve una “campaña inaceptable de acoso” que sufre una jueza de Catarroja, en Valencia, que investiga la gestión política de la dana. “No he visto ninguna muestra de solidaridad con ella”, apuntó Bolaños, lo que invita a reflexionar sobre la falta de apoyo a quienes ejercen una labor fundamental en la justicia.
En respuesta a las preguntas de García sobre la dimisión del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, quien enfrenta un juicio oral por presuntas filtraciones de datos, el ministro reiteró que esta situación es una clara ilustración del “sanchismo”, describiendo al fiscal como “del estrado al banquillo” con una fianza de 150,000 euros.
Por su parte, García expresó su solidaridad con la jueza y también con el magistrado que investiga a David Sánchez, hermano del presidente Pedro Sánchez. Según ella, la situación actual del Ejecutivo es una “semana negra” marcada por la apertura de juicio a figuras cercanas al poder y una creciente presión sobre la justicia.
El debate en el Senado pone de manifiesto la tensión existente entre el Gobierno y el PP en torno a la justicia y la independencia judicial, un tema que sigue siendo crucial en la política española contemporánea.