El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha decidido suspender a un agente federal de inmigración tras un incidente en el que empujó a una mujer ecuatoriana en un tribunal de Manhattan. Este tipo de medida es poco común, especialmente considerando que proviene del gobierno del presidente Donald Trump.
El altercado, que ha sido ampliamente documentado a través de videos en redes sociales, ocurrió en la ciudad de Nueva York después del arresto del esposo de la mujer. Las grabaciones muestran a la ciudadana rogándole al agente en español y expresando su descontento por su aparente indiferencia.
En el video, se puede observar cómo la mujer es empujada contra una pared, lo que provoca que caiga al suelo en un pasillo lleno de gente. Este comportamiento ha suscitado reacciones de indignación en diversas plataformas, destacando la necesidad de una revisión en el trato hacia los individuos en procesos judiciales.
La sanción impuesta al agente del DHS refleja una acción correctiva, aunque inusual, en el contexto de la política migratoria actual, que ha estado marcada por la controversia y la crítica. Este episodio subraya la importancia de garantizar un trato humanitario y respetuoso en todos los ámbitos del sistema judicial.
