TIZIMÍN.— A pesar de que la localidad enfrenta un grave problema de drogadicción, la Policía Municipal ha informado que ha habido una disminución en las detenciones por posesión de sustancias prohibidas en comparación con el trimestre anterior. De acuerdo con los registros de las autoridades, los jóvenes y adultos menores de 40 años son los más afectados por las adicciones.
Carlos Noé Osorio Perera, el jefe policial de la localidad, mencionó que aunque la situación sigue siendo alarmante, los esfuerzos constantes en prevención y vigilancia están mostrando resultados positivos. Por ejemplo, en junio se registraron 32 detenciones por posesión de drogas, mientras que en agosto esa cifra se redujo a 15 casos. “Al inicio del año teníamos varios casos cada semana; ahora, gracias a las acciones continuas, hemos logrado reducir estas cifras, ya que saben que la Policía está atenta”, afirmó.
Entre las sustancias más frecuentemente confiscadas se encuentran la marihuana y el “cristal”, mientras que otras drogas aparecen con menor frecuencia. En julio, se realizaron dos puestas a disposición ante la Fiscalía General del Estado por posesión de varias dosis, lo que indicaba un posible tráfico de drogas.
Además de las detenciones, la corporación ha intensificado sus esfuerzos en prevención en escuelas y centros laborales. Durante el último año, se han impartido charlas a más de tres mil estudiantes de secundaria y bachillerato, abordando temas sobre drogadicción como parte de su programa preventivo. “También hemos visitado empresas y centros laborales, donde discutimos no solo la prevención, sino también otros temas relacionados con las adicciones”, añadió Osorio Perera.
Como parte de una estrategia integral, la Policía Municipal colabora con el Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA), donde se canalizan varios casos, especialmente de jóvenes estudiantes. Se están llevando a cabo pláticas para establecer acuerdos con centros de desintoxicación, con el fin de ofrecer oportunidades de rehabilitación a quienes enfrentan problemas de consumo. “Sabemos que no es suficiente con detener; también es crucial ayudar y orientar, por eso buscamos trabajar con especialistas y centros que ofrezcan un tratamiento adecuado”, concluyó.