La tragedia golpeó a la familia de Alicia Matías la noche del viernes, cuando falleció tras permanecer varios días en el Hospital Magdalena de las Salinas. Alicia, de 49 años, quedó gravemente herida en la explosión ocurrida en Iztapalapa, donde su heroísmo brilló al proteger a su nieta durante el siniestro.
La explosión, que conmocionó a la comunidad, dejó a su paso un saldo de múltiples heridos y daños significativos. Alicia, en un acto de valentía, se interpuso entre las llamas y su nieta, salvándole la vida a costa de sufrir quemaduras severas. Su sacrificio no pasó desapercibido, y la noticia de su fallecimiento ha causado una oleada de condolencias y tributos en redes sociales.
Su cuerpo será trasladado a su hogar en La Paz, Estado de México, donde residió durante casi cinco décadas. La comunidad local se une en duelo, recordando la valentía y el amor de una abuela que, en sus últimos momentos, demostró que el amor familiar puede superar incluso las adversidades más grandes.
La historia de Alicia Matías resuena como un recordatorio de la fragilidad de la vida y la fortaleza del espíritu humano, dejando un legado de amor y sacrificio que perdurará en la memoria de quienes la conocieron.
