La mañana de este miércoles, familiares y amigos de la comandante Yusami Monterrosas Apolinar y del policía municipal Arturo Jiménez se reunieron en Palmarito Tochapan, Quecholac, para darles el último adiós tras ser asesinados mientras cumplían con su deber en San Salvador Huixcolotla.
Ambos policías fueron víctimas de un ataque armado el pasado 2 de noviembre, durante un patrullaje preventivo. En un emotivo cortejo fúnebre, los dolientes acompañaron los restos de los caídos hacia su última morada, después de realizar una misa de cuerpo presente en una iglesia local.
El traslado de los cuerpos se llevó a cabo por la carretera que une la junta auxiliar con la cabecera municipal, un trayecto que simbolizó la unión y el respeto de la comunidad hacia sus agentes caídos. Durante la ceremonia, se notó la presencia de habitantes de diversas comunidades cercanas que se sumaron al homenaje a estos valientes policías.
Por otro lado, el policía Roberto Pérez Trinidad, quien también fue asesinado junto a Yusami Monterrosas y Arturo Jiménez, recibió un homenaje en su ciudad natal, Tecamachalco, donde sus seres queridos realizaron una misa en su honor.
Los tres policías fueron atacados por un grupo armado que, según informes, pertenece a la llamada Operativa Barredora. Este ataque dejó a los agentes Roberto y Arturo sin vida en el acto, mientras que la comandante Yusami falleció en una ambulancia mientras era trasladada a un hospital en la capital poblana.
La pérdida de estos elementos de seguridad ha generado un profundo sentimiento de dolor en la comunidad, que se une en solidaridad y respeto hacia sus familias en estos momentos difíciles. La labor de los policías, que arriesgan su vida diariamente por la seguridad de los ciudadanos, es recordada y valorada en este homenaje colectivo.
































































