Este 26 de septiembre, se llevó a cabo una marcha en Oaxaca para conmemorar los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero. La movilización, que comenzó alrededor de las 15:00 horas, reunió a normalistas, profesores y ciudadanos que exigieron justicia por la impunidad que rodea este caso, que ya lleva más de una década sin resolverse.
La manifestación se inició en las inmediaciones de Santa Lucía del Camino, frente a lo que alguna vez fue el IEEPO y la 28 zona militar. Durante el recorrido, se observó un silencio autoimpuesto en varios tramos, interrumpido ocasionalmente por consignas en apoyo a los desaparecidos. En el atrio del templo de Santo Domingo, los participantes colocaron figuras en memoria de los 43, simbolizando su lucha por justicia.
A medida que avanzaba la marcha por la carretera federal 190, algunos grupos comenzaron a vandalizar propiedades, incluyendo el Banco Bienestar y una sucursal de la cadena transnacional McDonald”s. También se registraron daños en la terminal de autobuses de primera clase y en otros edificios, donde se pintaron consignas en las fachadas. “No queremos represión” fue uno de los gritos recurrentes durante el recorrido por la ciudad.
Los normalistas, que en algunos momentos rompieron el silencio con gritos de protesta, se unieron a movilizaciones en otras ciudades del país, donde también se exige la presentación con vida de los 43 desaparecidos. La herida abierta por estos eventos aún persiste en una nación donde los avances gubernamentales para la resolución del caso han sido escasos.
Al llegar al zócalo, la movilización continuó con un mitin, aunque el número de manifestantes en esta etapa fue reducido. Allí, se volvieron a escuchar demandas de justicia en contra de los responsables de las desapariciones y se reiteró la necesidad de atención a este caso que ha marcado a la sociedad mexicana.
