Este jueves, cerca de 900 manifestantes, entre normalistas y padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, realizaron una movilización hacia el Campo Militar número 1, ubicado en la alcaldía Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México. Esta manifestación se llevó a cabo en el marco del onceavo aniversario de la desaparición de los jóvenes, un evento que ha marcado la lucha por justicia en el país.
Desde las primeras horas de la mañana, se comenzaron a recibir camiones con estudiantes que viajaron desde Guerrero. Junto a los familiares de los desaparecidos, llevaron a cabo un mitin frente a la Puerta 1 del complejo militar. Aunque en un principio la intención era concentrarse en la Fiscalía General de la República, los manifestantes decidieron cambiar de rumbo y dirigirse a las instalaciones militares.
Durante la protesta, un grupo de encapuchados utilizó un camión turístico para intentar derribar la entrada principal del Campo Militar. Posteriormente, incendiaron el vehículo y lanzaron petardos, cohetes y bombas molotov hacia el interior del recinto. Además, realizaron pintas sobre las paredes, al tiempo que coreaban consignas como “Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Las autoridades militares respondieron reforzando la seguridad en la zona y estableciendo barricadas para evitar el ingreso de los manifestantes, tras el incidente del vehículo incendiado que quedó bloqueando el acceso principal.
Las movilizaciones en Guerrero y en la Ciudad de México forman parte de las acciones realizadas por los familiares de los desaparecidos y los normalistas, quienes continúan exigiendo justicia y el esclarecimiento de los hechos ocurridos hace 11 años en Iguala.
La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha expresado su intención de solicitar apoyo de la ONU para investigar el caso Ayotzinapa, en un esfuerzo por avanzar en la búsqueda de justicia para las víctimas y sus familias.