La tarde del 23 de septiembre de 2025, un trágico suceso marcó la historia del CCH Sur de la UNAM. Un estudiante ingresó a las instalaciones del plantel y atacó a otro joven con un arma blanca, lo que resultó en la muerte de la víctima. Durante su intento de huida, el agresor también hirió a un trabajador de la institución. Sin embargo, al verse atrapado, el atacante saltó desde un tercer piso, sufriendo fracturas en ambas piernas. El joven de 19 años que llevó a cabo el ataque fue posteriormente trasladado a un hospital y se encuentra bajo custodia.
En respuesta a estos lamentables eventos, el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, emitió un mensaje a través de redes sociales expresando su profundo pesar y consternación. Lomelí destacó que toda la comunidad universitaria se encuentra en duelo por la pérdida del estudiante y reconoció que el incidente ha impactado a todos. Este acto de violencia, perpetrado por un miembro de la misma comunidad, plantea la necesidad de una reflexión profunda sobre la seguridad en los campus universitarios.
El rector extendió sus más sinceras condolencias a la familia del estudiante fallecido y mostró su solidaridad con el CCH Sur y todos los integrantes de la universidad, afirmando que este dolor es compartido por todos. En su declaración, Lomelí no solo condenó la violencia, sino que también delineó medidas concretas para asegurar que la UNAM continúe siendo un espacio seguro y un faro de conocimiento.
Antes del ataque, el agresor, conocido como Lex Ashton, había anticipado sus intenciones en redes sociales. En su perfil de Facebook, compartió imágenes del equipo que utilizaría, incluyendo una sudadera con la palabra “BLOODBATH”, gas pimienta, y varias armas blancas. Este contexto resalta la necesidad urgente de abordar la seguridad en las instituciones educativas y prevenir futuros incidentes similares.
La UNAM se enfrenta a un momento crítico donde la seguridad y el bienestar de sus estudiantes deben ser prioritarios para garantizar un entorno de aprendizaje seguro.