La realidad es que la digitalización en la educación está tomando un nuevo rumbo en México. Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), siete de cada diez niños de entre seis y once años utilizan dispositivos electrónicos de forma regular, lo que resalta la creciente necesidad de integrar la tecnología en su vida cotidiana.
El auge de los gadgets en la educación
A pesar de que los dispositivos electrónicos no son parte de los útiles escolares obligatorios, se han vuelto esenciales para los estudiantes. Para los niños menores de seis años, incluso en el jardín de niños, ya comienzan a usar tecnología que les ayudará a desenvolverse mejor en un mundo cada vez más digital. La Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH), con datos actualizados hasta julio de 2024, revela que en México hay aproximadamente 17,176,924 hogares que cuentan con al menos una tableta, computadora portátil o de escritorio, lo que representa un 43.9 por ciento del total de los hogares.
De esta cantidad, el INEGI destaca que el uso de gadgets no solo facilita el acceso a la información, sino que también potencia el desarrollo de habilidades tecnológicas en los niños, lo que a su vez puede mejorar su aprendizaje. Esto resulta crucial en un entorno educativo donde las tareas escolares requieren cada vez más el uso de tecnología.
Impacto económico de la digitalización
El uso de dispositivos electrónicos no es solo una cuestión de acceso a la información; también representa un gasto significativo para las familias. Mantener la tecnología requería un esfuerzo económico considerable. Según datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), el costo promedio de una computadora ha aumentado de 5,243 pesos en 2016 a 8,603 pesos en 2022. Por otro lado, el servicio de internet fijo en casa tiene un costo mensual promedio de 544 pesos.
La penetración de dispositivos electrónicos es notablemente alta, con más de 100,000,000 de usuarios registrados en el país en 2024. Esto indica que la tecnología está cada vez más presente en la vida de los jóvenes, especialmente en las escuelas privadas donde las actividades digitales son parte integral del currículo.
No cabe duda de que la digitalización de la educación se ha convertido en una necesidad y no en una opción. Con el avance de la tecnología, es fundamental que tanto escuelas como familias se adapten a esta nueva realidad, asegurando así que los niños cuenten con las herramientas necesarias para sobresalir en su educación y desarrollo personal.