Un grave acto de vandalismo ha afectado las pinturas rupestres de la zona arqueológica conocida como La Mano Pintada, localizada en el cerro de la junta auxiliar de Santa María Xuchapa, en Izúcar de Matamoros. Según los primeros informes, las figuras fueron destruidas con herramientas como picos y palas. Hasta el momento, se desconoce la fecha exacta del ataque y no se han identificado a los responsables, aunque el daño a este patrimonio cultural es ya evidente.
Leonardo Onofre, expresidente auxiliar de la comunidad, expresó su tristeza por lo sucedido, destacando que nunca antes se había registrado un acto de vandalismo en el lugar, a pesar de la falta de protección histórica. “Nunca antes había ocurrido un acto vandálico como este, del cual no se sabe quién o quiénes lo perpetraron, ni cuál fue el objetivo de dañar lo que se considera patrimonio de todos”, afirmó.
La Mano Pintada debe su nombre a las figuras rupestres grabadas en la pared rocosa, que se remontan aproximadamente al año 200 d.C., lo que subraya su importancia arqueológica e histórica tanto para Izúcar como para el estado de Puebla.
Este ataque ocurre pocos meses después de que el gobernador Alejandro Armenta Mier visitara la zona a finales de junio de 2025, donde anunció una inversión de cifra exacta no especificada destinada a obras comunitarias, incluyendo el rescate de este sitio y el mejoramiento del Ojo de Agua, otro atractivo natural de Xuchapa.
En respuesta a este vandalismo, la comunidad ha exigido la intervención inmediata del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y de las autoridades estatales para evaluar el daño, implementar medidas de protección y evitar que incidentes similares se repitan en el futuro.