En un reciente encuentro con la prensa, la regidora de Tampico, Silvia Olvera Saldivar, dejó claro que no tiene respuestas sobre temas importantes que afectan a la comunidad, lo que ha generado preocupación entre los ciudadanos. Ante preguntas sobre posibles estafas que involucran a adultos mayores y ofertas de tarjetas de descuento, la edil solo pudo decir: “no, no sé, déjame pregunto”.
La situación se torna más alarmante cuando se considera que las estafas dirigidas a los sectores más vulnerables de la sociedad son un problema latente. En este contexto, los adultos mayores han expresado su inquietud acerca de supuestos empleados de Bienestar Social que solicitan datos personales como fotos y firmas a cambio de estas tarjetas. Sin embargo, la regidora no ofreció ninguna información concreta al respecto.
Desconocimiento y falta de respuesta
Además de no estar al tanto de las estafas, Olvera admitió que no sabe si se está llevando a cabo un censo casa por casa relacionado con un proyecto de descuentos en negocios. A pesar de haber mencionado previamente que se trabaja en ello, su falta de información es evidente: “No, no estoy enterada ni siquiera si ya están levantando esa información”, aseguró sin titubeos.
Cuando se le preguntó sobre algún consejo para la ciudadanía en estos casos, la regidora fue clara: “no pues yo no puedo decirles nada”. Esta falta de dirección genera un vacío que deja a los ciudadanos en una situación precaria, especialmente a aquellos que buscan apoyos y descuentos para mejorar su calidad de vida.
Reacciones y críticas al desempeño
En una entrevista anterior, la regidora también había sido cuestionada sobre el censo de fauna silvestre en la laguna del Carpintero, donde se le preguntó sobre el levantamiento de información sobre las especies presentes. Nuevamente, su respuesta fue evasiva: “no, pero fíjate que es una buena idea, lo voy a tocar con la comisión”, sin que hasta el momento se haya visto progreso en ese sentido.
Al concluir la entrevista, y tras asegurarse de que ya no era grabada, Olvera recriminó a la reportera por haberla entrevistado sin previo aviso, exclamando: “estuvo muy mal lo que hiciste”. Esta reacción no solo demuestra su descontento, sino también la falta de voluntad de rendir cuentas a la ciudadanía que representa.
La realidad es que los regidores, como Silvia Olvera, tienen la responsabilidad de estar informados y ser accesibles a la ciudadanía, una expectativa que parece lejana en este caso. La falta de respuestas y la evasión de responsabilidades no hacen más que profundizar la desconfianza de los ciudadanos hacia sus representantes.