Los dispositivos inteligentes, como Amazon Echo y Google Nest, están escuchando más de lo que imaginas, incluso cuando no crees que estén activos. Este fenómeno, conocido como “activación accidental”, ha sido documentado en un reciente estudio de la Universidad de Northeastern, donde se identificaron hasta 1,043 activaciones no intencionadas en altavoces inteligentes durante el uso cotidiano. Esto plantea serias inquietudes sobre la privacidad y el control que tenemos sobre nuestros propios datos.
El funcionamiento de los altavoces inteligentes
Los altavoces inteligentes están programados para captar comandos de voz mediante palabras clave como “Alexa”, “Hey Google” o “Oye Siri”. Sin embargo, lo alarmante es que estos dispositivos tienen microfonos que, en muchos casos, nunca se apagan por completo, lo que significa que están en un estado de pre-escucha constante. ¿Qué significa esto para ti? Que podrían estar recogiendo información sin que lo sepas.
Cuando hablamos de privacidad, es fácil pensar en contraseñas o correos electrónicos, pero los dispositivos inteligentes van más allá: recopilan datos sobre tu voz, ubicación, hábitos diarios y hasta lo que ves en la televisión. En la mayoría de los casos, esta información se procesa en la nube, donde el usuario tiene algo de control a través de las configuraciones de privacidad. Sin embargo, muchas veces, este control puede ser limitado.
Cambios en las políticas de Amazon
Un cambio significativo en la gestión de datos se implementará el 28 de marzo de 2025 con una actualización de las políticas de privacidad de Amazon. Esta actualización afectará cómo se procesan las peticiones de voz en dispositivos como el Echo Dot y el Echo Show. Amazon ha comunicado que, para mejorar las nuevas funciones de inteligencia artificial, todas las solicitudes de voz a Alexa se procesarán en la nube. Esta decisión ha generado preocupación entre los usuarios, quienes ya no podrán optar por un procesamiento local al 100%.
A pesar de estas restricciones, Amazon ofrece la opción de no guardar las grabaciones, pero esto también implica que funciones como el reconocimiento de voz personalizado dejarán de estar disponibles. La compañía asegura que, aunque las grabaciones se envíen a la nube, los usuarios pueden configurar su cuenta para evitar su almacenamiento. Pero, ¿realmente estás dispuesto a sacrificar la funcionalidad por privacidad?
¿Qué puedes hacer para proteger tu privacidad?
No es necesario deshacerse de todos tus dispositivos inteligentes, pero es fundamental entender cómo funcionan y qué opciones tienes para recuperar un poco de control sobre tu información personal. Cada vez que interactúas con tu altavoz, es posible que estés compartiendo más datos de los que imaginas. Además, si te has preguntado si esta información se utiliza para publicidad, la respuesta es un rotundo sí; tus hábitos de consumo pueden ser utilizados para mostrarte anuncios más personalizados.
Así que si de repente ves anuncios relacionados con una conversación que tuviste en voz alta, ya sabes por qué. Es una invitación a reflexionar sobre cómo la tecnología, en su afán de facilitarnos la vida, también puede estar invadiendo nuestra privacidad. Mantente informado y cuida tus datos personales; al final, la comodidad no debería ir en detrimento de tu seguridad.