Nuevos reportes confirman que Andrés Manuel López Beltrán, hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador, gastó un total de 177 mil 067 pesos durante su estancia de 14 días en el lujoso The Okura Tokyo. Las facturas obtenidas por Aristegui Noticias revelan que, aunque admitió un costo de 7 mil 500 pesos por noche, ocultó gastos exorbitantes, incluyendo una cena de 47 mil 627 pesos en uno de los restaurantes del hotel.
La primera factura, que cubre del 15 al 21 de julio de 2025, muestra un gasto total de 63 mil 057 pesos, mientras que la segunda, del 22 al 28 de julio, asciende a 114 mil 164 pesos. En total, López Beltrán gastó un millón 405 mil 530 yenes, equivalentes a los 177 mil 067 pesos mencionados.
Detalles de las facturas indican que, además del hospedaje, López Beltrán incurrió en cargos por servicios de minibar, lavandería y un paquete de ‘fitness & spa’. La mayor parte del gasto se concentró en la cena del 22 de julio en el restaurante Sasanka, especializado en cocina japonesa, donde se registró el gasto más alto de su estancia.
A pesar de sus intentos por aclarar los gastos, el secretario de Organización de Morena no rindió cuentas sobre otros costos involucrados, lo que ha generado controversia. A través de una carta en redes sociales, López Beltrán negó haber viajado en aviones privados y rechazó que el costo de la habitación fuera de 50 mil pesos diarios, defendiendo el precio de 7 mil 500 pesos que reconoció.
Las revelaciones han generado críticas hacia el hijo del exmandatario, quien se ha enfrentado a acusaciones de ocultar información y de hacer un uso indebido de recursos. La secretaria de Comunicación de Morena, Camila Martínez, no proporcionó respuesta respecto a su salario actual ni a la transparencia de los gastos del partido.
The Okura Tokyo, conocido por su lujo tradicional y contemporáneo, se ha convertido en el epicentro de esta controversia, y muchos cuestionan cómo se justifica tal gasto mientras el país enfrenta desafíos económicos. López Beltrán, quien se registró en el hotel el 15 de julio y salió el 29 de julio, aseguró estar descansando de sus ‘extenuantes jornadas’ laborales en México.
Este caso pone de relieve la necesidad de mayor transparencia en los gastos de los funcionarios públicos y plantea preguntas sobre la ética en el manejo de recursos en medio de la crisis económica que enfrenta el país. Las facturas que han salido a la luz son solo una parte de un debate más amplio sobre la responsabilidad de los líderes en tiempos difíciles.
Con esto, el público espera respuestas claras y acciones concretas para garantizar que los recursos públicos sean utilizados de manera adecuada y transparente.