El caso de JonBenét Ramsey vuelve a sacudir al mundo justo 30 años después de la trágica muerte de esta niña de seis años en Boulder, Colorado. La investigación sigue abierta y las preguntas sin responder marcan una herida que no cierra para la familia y la sociedad.
El 26 de diciembre de 1996, una dura Navidad se tornó en pesadilla para los Ramsey: el cuerpo sin vida de JonBenét Ramsey fue hallado en el sótano de su casa. A 30 años de ese hallazgo, la evidencia y las sospechas siguen generando polémica.
Una Navidad marcada por un crimen brutal
Todo comenzó cuando Patsy Ramsey llamó a la policía tras hallar una nota de rescate que exigía 118,000 dólares, monto que coincidía con un bono reciente de su esposo John Ramsey. La nota fue escrita en hojas de la propia casa, complicando la hipótesis de una intrusión extranjera.
Poco después, John encontró el cuerpo de JonBenét cubierto con una sábana blanca. La niña presentaba múltiples lesiones: cuerda al cuello, manos atadas, cinta adhesiva en la boca, marcas claras de asfixia y un golpe fuerte en la cabeza. El informe forense reveló además indicios de abuso sexual.
Errores policiales que truncaron la investigación
Desde el primer momento, la investigación estuvo plagada de fallos graves. Autoridades admitieron que familiares y personas cercanas circularon libremente por la casa antes de que se examinaran todas las pruebas. La nota de rescate fue manipulada varias veces, lo que pudo borrar rastros clave.
Mientras la policía local dirigió sus sospechas hacia la familia, la fiscalía encabezada por Alex Hunter tuvo un enfoque menos estricto, permitiendo que los abogados familiares accedieran parcialmente al expediente, creando un ambiente tenso y dividido en la investigación.
En 1999, un gran jurado recomendó imputar a los padres por abuso infantil y encubrimiento, pero la falta de pruebas contundentes detuvo cualquier acusación formal, dejando el caso paralizado.
Avances forenses y sospechosos descartados
En 2006, se detuvo a John Mark Karr, quien aseguró haber participado en el crimen. Sin embargo, pruebas de ADN lo descartaron rápidamente, reabriendo el debate público y mediático.
En 2008, la fiscalía descubrió un perfil genético masculino no identificado en la ropa de JonBenét, lo que fortaleció la teoría de un agresor externo y alejó la culpa directa de los Ramsey. Aun así, ni autoridades ni la opinión pública aceptan la exoneración absoluta de la familia.
30 años sin resolución y la esperanza en nuevas tecnologías
El Departamento de Policía de Boulder sostiene que la investigación permanece activa con más de 21,000 líneas de investigación y miles de entrevistas en al menos 19 estados.
Recientemente, la familia y grupos de víctimas impulsan el uso de genealogía genética avanzada para encontrar nuevos indicios, aunque hasta ahora esta tecnología no ha arrojado resultados decisivos.
“Nuestra gran frustración desde el primer día fue que la policía no tenía la capacidad ni la experiencia para manejar este caso,” declaró John Ramsey.
El caso JonBenét Ramsey sigue siendo uno de los misterios criminales más impactantes y sin resolver en Estados Unidos, y mantiene su impacto mediático y emocional también en México y el mundo. Los avances forenses y las nuevas generaciones de investigadores mantienen viva la esperanza de que algún día se conozca la verdad detrás de este crimen horrendo ocurrido en una Navidad que cambió para siempre a una familia y al público mundial.
Estaremos atentos a cualquier novedad sobre este caso emblemático y te mantendremos informado.