El Ciclón Tropical Raymond ha perdido fuerza y se ha transformado en un sistema postropical, según el último informe del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Miami. A pesar de su disipación, los efectos remanentes del fenómeno continúan generando lluvias y un riesgo de inundaciones en Baja California Sur y otras regiones del noroeste de México.
En el reporte emitido a las 20:00 horas del sábado, se señaló que el centro del sistema se encontraba a aproximadamente 10 kilómetros del extremo sur de Baja California Sur, con coordenadas cerca de la latitud 22.9 norte y longitud 110.0 oeste. Se registraron vientos sostenidos de 45 km/h, desplazándose hacia el nor-noroeste a 15 km/h.
Aunque el Ciclón Tropical Raymond ya no representa una amenaza directa, se anticipan lluvias intensas en zonas montañosas y costeras de Baja California Sur, así como en el noroeste de Sinaloa, el norte de Chihuahua y gran parte de Sonora. Las precipitaciones podrían provocar inundaciones repentinas, especialmente en áreas con suelos saturados o infraestructura pluvial limitada.
El NHC ha señalado que se espera que las acumulaciones de lluvia en los estados afectados oscilarán entre dos y cuatro pulgadas, mientras que en el centro de Sinaloa y el sureste de Baja California Sur se prevén entre una y dos pulgadas adicionales. Además, la humedad residual podría extender sus efectos hacia el suroeste de Estados Unidos durante el domingo y los primeros días de la próxima semana.
Este fenómeno alcanzó la categoría de Tormenta Tropical Raymond a principios de la semana y mantuvo actividad sobre el océano Pacífico oriental antes de debilitarse frente a las costas mexicanas. Su debilitamiento llevó al NHC a emitir su último aviso, confirmando que el sistema se había convertido en una baja presión remanente.
A pesar de su debilitamiento, las marejadas generadas por el sistema continuarán afectando las costas del occidente de México y el sur de Baja California Sur hasta la mañana del domingo. Las autoridades locales han recomendado evitar actividades en el mar y mantenerse alerta en zonas costeras debido a condiciones de oleaje elevado y corrientes marinas peligrosas.