Medir el dolor con dinero supera la escala del 1 al 10 según estudio internacional
Un estudio internacional dirigido por la Universidad de Lancaster acaba de revelar que poner un precio económico al dolor ofrece una forma más precisa y confiable de medir el sufrimiento comparado con la tradicional escala numérica del 1 al 10.
Este método innovador surge tras una serie de experimentos con más de 300 voluntarios de entre 18 y 60 años, expuestos a estímulos dolorosos leves. Los participantes calificaron su dolor no solo con la clásica escala numérica, sino también indicando cuánto dinero aceptarían para volver a sentir ese dolor.
Los resultados, publicados en la revista Social Science & Medicine, demostraron que la escala monetaria detecta con mayor claridad los distintos niveles de dolor. Además, distinguió de forma más consistente los efectos del alivio en un experimento donde un grupo recibió analgesia y otro un placebo.
Más precisión para mejorar tratamientos y ensayos clínicos
El profesor Carlos Alós-Ferrer, de la Escuela de Administración de la Universidad de Lancaster, resaltó que la escala tradicional de dolor tiene limitaciones importantes debido a que la percepción del dolor es subjetiva y variable entre individuos. “Lo que una persona califica como un dolor 3, otra puede sentirlo como un 5”, explicó.
Esta nueva técnica ofrece un marco común al convertir el dolor en valor monetario, facilitando comparaciones más precisas tanto en ensayos clínicos como en estudios de tratamientos analgésicos.
Según los investigadores, mejorar la medición del dolor autoinformado es crucial para evitar un manejo inadecuado en urgencias, reducir el impacto en la calidad de vida de quienes sufren enfermedades crónicas y aliviar la carga económica sobre los sistemas de salud.
El impacto global del dolor y sus costos millonarios
Por ejemplo, en Estados Unidos se gastan más de 600,000 millones de dólares al año en tratamiento del dolor, cifra que supera ampliamente los costos asociados a enfermedades cardíacas y diabetes. Este estudio aporta una herramienta complementaria para avanzar hacia una mejor evaluación y manejo del dolor, un tema de gran relevancia internacional que también afecta a México.
En un contexto donde los sistemas de salud buscan optimizar recursos y mejorar la atención, la investigación abre la puerta a un nuevo paradigma que usa la valoración económica para enfrentar un problema universal y desafiante.
¿Qué sigue después del descubrimiento?
Los autores del estudio llaman a seguir perfeccionando esta metodología y explorando su aplicación en diferentes tipos y niveles de dolor, con la esperanza de que pronto se incorpore en prácticas clínicas y de investigación médica a nivel global, beneficiando a pacientes y profesionales.
Por ahora, la pregunta tradicional “califica tu dolor del 1 al 10” comienza a mostrar sus días contados, dando paso a un método más tangible y compartido que podría revolucionar el tratamiento del dolor a nivel mundial.