El Zoológico del Altiplano, situado en Apetatitlán, Tlaxcala, ha adoptado un modelo internacional conocido como los cinco dominios, que se centra en asegurar el bienestar integral de los animales. Este enfoque no solo busca prevenir el sufrimiento, sino que también busca proporcionar una vida digna y plena a cada uno de sus habitantes.
El modelo abarca cinco componentes esenciales: una alimentación adecuada que incluye agua limpia y dietas balanceadas, un entorno seguro y enriquecido que fomente la exploración, atención médica constante con revisiones periódicas, la libertad para exhibir comportamientos naturales y un estado mental positivo que promueva la calma, la curiosidad y la felicidad.
Con una superficie de 13.5 hectáreas, el zoológico alberga a 534 animales de 104 especies diferentes, distribuidos en cinco circuitos temáticos que incluyen fauna nacional, felinos menores y mayores, sabana africana, fauna exótica y una zona recreativa. Además, el zoológico cuenta con instalaciones como un salón interactivo, un aula audiovisual, un serpentario, un nocturnario y un lago artificial, lo que lo convierte en un espacio ideal para el aprendizaje, la convivencia y la conservación.
Entre las especies que se pueden observar en este zoológico destacan el jaguar, el tigre, el león africano, el oso negro, así como una variedad de aves, reptiles y mamíferos. Fundado en los años setenta en el parque natural Lago del Niño, el zoológico fue trasladado en 2004 a las instalaciones del ex-rancho La Aguanaja, evolucionando para convertirse en un lugar accesible para la comunidad que combina la recreación con la educación ambiental, la investigación y la conservación.