Etiopía responde con firmeza a amenazas de Egipto por agua del Nilo
Etiopía emitió hoy un contundente mensaje a Egipto en medio de la escalada por el control y uso de las aguas del río Nilo, luego de la inauguración de la Gran Presa del Renacimiento Etiopé, el mayor proyecto hidroeléctrico de África.
El Ministerio de Agua y Energía de Etiopía declaró que no se dejará intimidar ni presionar para renunciar a su derecho histórico a usar el río en función de sus necesidades hídricas y desarrollo nacional. “El ascenso de Etiopía es una realidad irreversible”, resaltaron las autoridades, dejando claro que continuarán con su política de aprovechamiento.
Presidente de Egipto advierte medidas contundentes
Por su parte, Abdelfatah al Sisi, presidente de Egipto, calificó la inauguración de la presa como un acto “intransigente” y acusó a Etiopía de actuar con irresponsabilidad en la gestión de las aguas del Nilo. Advirtió que Egipto no se quedará de brazos cruzados ante esta situación y tomará “todas las medidas necesarias para proteger sus intereses y seguridad hídrica”.
La tensión entre ambos países se desarrolla en un contexto donde el Nilo es vital para la supervivencia y economía egipcia, mientras que Etiopía busca potenciar su capacidad energética y su desarrollo.
Disputa histórica y geopolítica en la cuenca del Nilo
El proyecto de la Gran Presa del Renacimiento ha sido controversia desde su planificación, generando rechazo y preocupación en Egipto y Sudán, que consideran que la represa afecta sus derechos y pone en riesgo su seguridad hídrica. La cuenca del río Nilo incluye a 11 países, atravesados por dos afluentes principales: el Nilo Blanco y el Nilo Azul. Este último, que nace en Etiopía, aporta un 85% del agua del río, haciendo que el control de estas aguas sea estratégico y fuente de conflictos.
Las negociaciones históricas han sido tensas, y según el gobierno etíope, Egipto no ha mostrado voluntad de diálogo equitativo, complicando acuerdos para compartir el agua.
¿Qué sigue en la disputa por el agua del Nilo?
La situación se mantiene en desarrollo mientras ambas naciones refuerzan sus posiciones. Expertos internacionales y organismos regionales podrían intentar mediar para evitar una escalada mayor. Para México y otras regiones con desafíos hídricos, este conflicto resalta la creciente importancia estratégica del agua y los recursos naturales ante desafíos climáticos y geopolíticos.
La comunidad global observa con preocupación los próximos movimientos en este pulso estratégico entre Etiopía y Egipto, cuyo impacto puede extenderse a toda la región del noreste de África.