MÉRIDA.— El barrio de San Sebastián se llenó de vida y espiritualidad este domingo, en una celebración que honró a la Virgen de la Asunción. Desde el pasado 3 de agosto, la festividad atrajo a cientos de feligreses que acompañaron al gremio Sindicato de Matarifes en un recorrido solemne hacia la parroquia. Este año, la celebración cobra especial relevancia, ya que el gremio se prepara para conmemorar su centenario en 2024.
La festividad no solo se centró en la devoción religiosa, sino que también fue un despliegue de cultura y tradición. El desfile estuvo marcado por el colorido de los trajes típicos y la participación de jaraneros, quienes llevaban en sus cabezas la icónica cabeza de cochino, acompañados de toritos, un cebú, calesas y caballos. La música de la banda de guerra de la preparatoria Mesoamericana elevó el ambiente festivo, mientras que los voladores, trasladados en un camión, añadieron un toque especial a la procesión.
La iglesia lució abarrotada de familias enteras, desde niños hasta adultos mayores, quienes participaban con entusiasmo en la ceremonia. La presencia de autoridades municipales y estatales también se hizo notar, destacando la importancia social y cultural de este evento.
En la ceremonia, el presbítero Lorenzo Mex ofreció un mensaje de unidad y compromiso, instando a los asistentes a fomentar comunidades sanas basadas en el respeto y la compasión. “Necesitamos comunidades sanas que nos capaciten para ser compasivos y misericordiosos como el Señor”, expresó el sacerdote, quien también hizo un llamado a enfrentar la violencia y la pérdida de dignidad en el país.
El gremio de Matarifes, que celebra 99 años de fundación, presentó un nuevo pabellón y estandarte, manteniendo un estandarte más antiguo que data de 1926. Su secretario general, Carlos Herrera Chalé, conocido como “Calín”, enfatizó que esta tradición es un legado familiar que se transmite de generación en generación. Cada año, se donan vestidos y joyas a la Virgen, siendo el vestido actual de color verde esmeralda con bordados típicos.
Con un total de 126 socios y sus familias, la prioridad del gremio es la procesión y veneración a la Virgen, destacando su compromiso con la fe por encima de bailes o espectáculos. En un gesto solidario, se realizan obras de caridad, como la entrega de alimentos a albergues, y este año tienen programado repartir 5,000 tortas y jugos.
La fiesta continuó con una misa a las 6 p.m., seguida de la quema de pirotecnia y la presentación de 20 toritos a las 8:30 p.m. La música popular estuvo a cargo de artistas como Paleto “La voz de la cumbia” y Alfredo “El Pulpo” y sus Teclados, quienes animaron a los asistentes hasta bien entrada la noche.
Mirando hacia el futuro, Herrera Chalé anticipó que el próximo año, durante la celebración del centenario, “tirarán la casa por la ventana”, prometiendo una festividad aún más grandiosa. Las celebraciones en honor a la Virgen de la Asunción continuarán hasta el 16 de agosto, y están abiertas a todo el público. “¡Participen! Les esperamos aquí en el barrio de San Sebastián”, invitó con entusiasmo el líder del gremio.
