ACTUALIZACIÓN URGENTE: Un trágico accidente ocurrió en Lisboa, donde el funicular de Gloria descarriló, dejando un saldo devastador de 16 muertos y 23 heridos. Según el Gabinete de Prevención e Investigación de Accidentes de Aeronaves y Accidentes Ferroviarios (GPIAAF), el incidente se produjo el 3 de septiembre de 2025 alrededor de las 18:03, cuando el cable subterráneo que unía los vagones se rompió.
El GPIAAF reveló que el accidente ocurrió durante el descenso, cuando las cabinas activaron los frenos de emergencia, pero estos no lograron detener la velocidad del vehículo. La cabina No. 2 retrocedió y se detuvo, mientras que la cabina No. 1 continuó su descenso a gran velocidad, descarrilándose aproximadamente 170 metros después de iniciar su recorrido.
Todo ocurrió en menos de 50 segundos, causando una colisión violenta que sorprendió a transeúntes y a las autoridades presentes. Los servicios de emergencia llegaron rápidamente al lugar para iniciar un operativo de rescate, logrando atender a los heridos en cuestión de minutos. De los 23 heridos, cinco fueron reportados en estado grave.
El funicular de Gloria, declarado monumento nacional, ha estado en funcionamiento desde 1914 y es conocido por su pendiente media del 18%. Este sistema de transporte es crucial para la movilidad en Lisboa, y su accidente ha generado preocupación sobre la seguridad de los medios de transporte en la ciudad.
Las primeras conclusiones indican que el cable se rompió en su punto de anclaje en la cabina superior, mientras el resto de los componentes del sistema se encontraban en condiciones adecuadas. Sin embargo, el GPIAAF aún no ha podido confirmar si el sistema de frenos funcionó correctamente en el momento del accidente.
La investigación continúa y se espera que el GPIAAF publique un informe preliminar en octubre, donde se espera incluir recomendaciones de seguridad. Mientras tanto, el incidente ha generado un debate urgente sobre la supervisión y mantenimiento de sistemas de transporte similares que operan en otras ciudades.
Este accidente resalta la necesidad de garantizar la seguridad en el transporte público, no solo en Portugal, sino también en México y otras naciones, donde los sistemas de transporte enfrentan retos similares. Las autoridades están llamadas a actuar de inmediato para evitar nuevas tragedias.
