ACTUALIZACIÓN: El Gobierno español ha aprobado este martes un ambicioso proyecto de ley que condona hasta 83,252 millones de euros de deuda a las comunidades autónomas, un hecho que reconfigura el panorama económico regional.
Las comunidades más beneficiadas son Andalucía y Cataluña, con una condonación de 18,791 millones de euros y 17,104 millones de euros, respectivamente, acaparando más del 43% del total asignado. Este proyecto surge tras el reciente pacto entre el PSOE y ERC para aliviar la carga financiera de Cataluña.
La Ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha explicado que la metodología de condonación se basa en una serie de fases que busca equilibrar la deuda acumulada por las comunidades. La primera fase calcula el diferencial de endeudamiento entre 2009 y 2013 con los años hasta 2023, lo que resulta en una condonación media del 19% de la deuda total vigente.
El proceso legislativo se encuentra en marcha, con la intención de que el texto sea enviado a las Cortes Generales para su debate y aprobación. La situación ha generado tensiones, ya que las comunidades del PP se retiraron de la reunión en la que se votó la propuesta, interpretando el gesto como una abstención, aunque su oposición sigue latente.
La medida no afecta a Euskadi y Navarra, que han expresado interés en recibir compensaciones similares a través de sus sistemas forales. A pesar de las críticas, se espera que las comunidades que se oponen finalmente se acojan a la condonación si se aprueba.
Las comunidades autónomas que seguirán en el ranking de beneficiadas incluyen la Comunidad Valenciana con 11,210 millones, Comunidad de Madrid con 8,644 millones, y Castilla-La Mancha con 4,927 millones, entre otras. Esta reestructuración de la deuda promete impactar significativamente en la gestión financiera de las regiones afectadas.
En las próximas horas, el Gobierno buscará asegurar el apoyo necesario para avanzar con este proyecto, mientras que la población observa atentamente las decisiones que se tomarán en las Cortes Generales y su impacto en el bienestar regional.
Con esta iniciativa, el Gobierno busca no solo aliviar la carga de deuda, sino también corregir disparidades económicas entre las comunidades autónomas, un tema que ha generado un fuerte debate y que podría cambiar la dinámica del financiamiento regional en España.
