Google Drive lanza función para detener ataques de ransomware y recuperar archivos
Google acaba de anunciar una actualización vital en Google Drive que busca frenar de raíz los ataques de ransomware y ofrecer una solución directa para recuperar archivos cifrados o dañados. Esta medida, que iniciará en fase beta el 14 de octubre, ya está generando expectativa global y representa una defensa activa sin precedentes para usuarios personales y empresas.
Con el aumento de ataques que convierten dispositivos en verdaderos rehenes digitales, Google Drive da un salto importante al integrar un sistema que detecta comportamientos riesgosos asociados al ransomware, bloquea la sincronización y permite la restauración desde versiones previas de archivos afectadas, todo desde la misma plataforma.
Detección automática y respuesta rápida
Esta nueva función requiere la versión 114 o superior de Google Drive para escritorio. Su mecanismo identifica patrones de cifrado malicioso y detiene automáticamente la sincronización para evitar que los archivos encriptados se suban a la nube, bloqueando así la expansión del daño. El usuario y, en caso de ser una cuenta corporativa, el administrador de Google Workspace reciben alertas instantáneas para actuar con rapidez.
Así, los afectados no quedarán atrapados por el ransomware en sus dispositivos ni tampoco verán comprometidas sus copias en la nube, una falla común que expone a muchos usuarios a pérdidas de datos irreparables.
Restauración sin depender de copias locales ni terceros
Quizá el avance más impactante sea la posibilidad de restaurar múltiples archivos dañados directamente desde Google Drive, regresándolos a un estado anterior al ataque. Se trata de un proceso manual con una interfaz guiada paso a paso, que representa una solución clave cuando no existe un respaldo reciente o este también ha sido afectado.
Por primera vez, Google permite a sus usuarios recuperar datos comprometidos sin recurrir a complicados procesos o servicios externos que suelen ser costosos y poco confiables, especialmente para usuarios individuales.
Implementación gradual y alcance empresarial
La función se desplegará inicialmente para clientes de Google Workspace de las ediciones Business Standard, Business Plus, Enterprise y Education. Los administradores deberán habilitarla desde el panel de configuración, por lo que su activación no será automática para todas las cuentas.
Para usuarios personales, Google asegura que también estarán cubiertos una vez concluya la fase beta, aunque aún no hay fecha oficial para esta liberación masiva.
Un cambio radical en la seguridad en la nube
Este avance demuestra cómo la nube deja de ser un simple lugar de almacenamiento para convertirse en un espacio con seguridad activa y autónoma. Para millones de usuarios en México y el mundo, significa una capa adicional de protección frente a una de las amenazas digitales más destructivas y comunes.
Google Drive se posiciona así como un aliado clave para mantener la integridad y disponibilidad de datos en un entorno cada vez más amenazado por el ransomware, aumentando la confianza digital con certezas reales y no solo promesas.
La pandemia del ransomware ha dejado heridas profundas en usuarios y empresas mexicanas, con pérdidas de información valiosísima y tiempos muertos críticos. Esta noticia representa un respiro y una esperanza tangible para proteger el patrimonio digital.
¿Qué sigue?
El despliegue continúa de manera progresiva y se espera que en las próximas semanas más organizaciones en México puedan activar la función. Los usuarios deben estar atentos a las actualizaciones de Google Drive y prepararse para activar esta herramienta que puede marcar la diferencia frente a futuros ataques.
En un mundo donde tener los datos en la nube ya no basta, la seguridad activa frente a amenazas como el ransomware es imprescindible. Con este sistema, Google eleva el estándar de protección y responde con rapidez cuando todo parece perdido.